El ministro Migraciones, José Luis Escrivá, ha manifestado que el Estado "tendrá que dar una respuesta integral" a la situación que vive Canarias, que en las últimas 36 horas ha recibido a 1.038 inmigrantes rescatados de pateras y cayucos, y hacer que "la capacidad de acogida responda a la dimensión del problema".

Escrivá ha viajado este sábado a Fuerteventura después de haber visitado Tenerife y Gran Canaria, en cuyo puerto de Arguineguín pudo ser testigo de la magnitud de la situación tras ver atracar a la Guardamar Talía con 50 hombres rescatados al sur de la isla y un campamento de Cruz Roja a pie de muelle con más de 200 personas.

Acompañado de la secretaria de Estado de Migraciones Hana Jalloul, el ministro ha conocido la realidad migratoria de Fuerteventura, donde desde enero han llegado a la isla majorera más de 950 personas a bordo de pateras.

Escrivá ha asegurado que la visita al archipiélago está siendo "muy intensa" y ha podido constatar la realidad que supone este flujo migratorio, intensificado durante estos días, por lo que desde "el Gobierno habrá que dar una respuesta integral a esta situación en lo que se refiere estrictamente a mis responsabilidades", ha dicho.

El ministro ha explicado que durante su visita a estas tres islas "hemos evaluado distintas opciones y hemos aprovechado para verlas sobre el terreno" para llevar a cabo una política "cuya capacidad de acogida responde a la dimensión del problema".

Una de las noticias más esperadas en Fuerteventura es la posible reapertura del centro de internamiento para extranjeros (CIE) de El Matorral, en desuso desde 2012, y demandada por el Cabildo.

Escrivá ha recordado que el CIE no es de su competencia, sino del Ministerio del Interior y, por tanto, depende de ese departamento y "de que las autoridades judiciales valoren la situación de cierre de fronteras".

Sin embargo, ha adelantado que durante su breve estancia en la isla visitará El Matorral para estudiar la posibilidad de destinar una parte a centro de acogida temporal de inmigrantes.

Las ONG han criticado la política de "parcheo" desde que a finales de 2019 se reabriera la ruta Canarias desde África con parada en Fuerteventura, pues denuncian que las autoridades locales y el Estado han improvisado una red de acogida en albergues del Cabildo y de Misión Cristiana Moderna, y en campos de lucha, escuelas hogares, y hasta en naves industriales para que los inmigrantes pasen la cuarentena por la covid-19.

Desde el pasado mes de septiembre, el Gobierno ha reubicado inmigrantes en un hotel de Corralejo, en el norte de la isla, bajo el cuidado de Cruz Roja, donde en estos momentos conviven unas 130 personas.

Además, Cruz Roja dispone de varios pisos en Puerto del Rosario que, en la actualidad, acogen sobre todo a mujeres con sus hijos, un centro que esta mañana ha visitado la secretaria de Estado de Migraciones.

Mientras llega la reapertura del centro de acogida de El Matorral, el ministro de Migraciones ha aclarado que el desvío de inmigrantes a recintos hoteleros será "una opción transitoria".

La agenda de Escrivá a Fuerteventura incluye una reunión con el presidente del Cabildo a la que también asiste la consejera autonómica de Derechos Sociales, Noemí Santana; visitar el CIE de El Matorral y saludar a los trabajadores de Salvamento Marítimo, en el muelle de Gran Tarajal, puerto base de la Salvamar Mízar.