El vicepresidente del Govern en funciones de president sustituto, Pere Aragonès, ha firmado este lunes por la tarde el decreto de convocatoria automática de elecciones para el 14 de febrero en Cataluña.

Así lo ha anunciado la Generalitat, después de que el presidente del Parlament, Roger Torrent, le haya remitido una resolución, firmada minutos antes, donde constata que, agotado el plazo de dos meses tras la inhabilitación de Quim Torra, ningún grupo parlamentario ha propuesto candidato para una investidura alternativa.

Con la firma del decreto de convocatoria, que se publicará oficialmente este martes, el Parlament quedará disuelto y funcionará la diputación permanente hasta la celebración de elecciones al cabo de 54 días, el 14F, aunque los partidos catalanes decidirán el 15 de enero si se dan las condiciones para que esos comicios puedan celebrarse o hay que aplazarlos debido a la pandemia de la COVID-19.

Torrent, que ha comparecido ante los medios para oficializar la finalización de los plazos preceptivos antes de la convocatoria automática de elecciones, ha destacado que la legislatura que termina ha estado "muy marcada por la represión y la judicialización de la actividad parlamentaria".

"Los tribunales se han inmiscuido en la actividad parlamentaria y han limitado la capacidad del Parlament para poder definirse políticamente", ha denunciado Torrent, que ha citado como momento especialmente "doloroso" el encarcelamiento de Jordi Turull antes de que terminara el debate sobre su investidura en marzo de 2018.

Tras las elecciones del 14F, según Torrent, debe iniciarse la "legislatura de la reconstrucción", para revitalizar Cataluña tras la crisis de la COVID-19 y para recomponer el "consenso estratégico del independentismo".

Previamente, al mediodía, los grupos parlamentarios catalanes se han reunido en el Parlament con el conseller de Acción Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia, Bernat Solé, para definir los preparativos de la cita electoral en plena pandemia.

Uno de los acuerdos alcanzados es que el Govern planteará la posibilidad de vacunar a las personas seleccionadas para integrar las mesas electorales antes de las elecciones, aunque no formen parte de un colectivo de riesgo.

También han acordado las franjas en las que se recomendará votar a los diferentes colectivos: de 09.00 a 12.00 horas los grupos de riesgo; de 12.00 a 19.00 horas la ciudadanía general y de 19.00 a 20.00 horas los contagiados, sospechosos o contactos estrechos.

Solé confía en que las elecciones se podrán celebrar de forma segura el 14F, aunque ha fijado el 15 de enero como fecha en que se podría decidir el aplazamiento de los comicios si así lo recomendase la situación epidemiológica.

La convocatoria electoral, ha destacado, solo se aplazará si la situación es de "confinamiento total" o si hay una actividad social "muy limitada" en la que no se pueda garantizar el derecho a voto de toda la población.

En la reunión, los grupos también han pactado que se haga un envío único de papeletas para que los ciudadanos puedan preparar su voto en casa antes de ir al colegio electoral.

El diputado de Cs Nacho Martín Blanco ha resaltado el tono "constructivo" del encuentro y el socialista Ferran Pedret ha llamado a tener confianza en el trabajo que están haciendo los grupos y las instituciones para garantizar unas elecciones seguras.

La líder de los comunes en el Parlament, Jéssica Albiach, ha lamentado que no se haya llegado a un acuerdo para hacer un único envío de propaganda electoral, mientras que la diputada de JxCat Elsa Artadi ha pedido seguir trabajando para facilitar el voto desde el extranjero, ampliando los plazos y permitiendo que los ciudadanos que viven fuera de España puedan imprimir sus papeletas en casa.