Casado necesita el apoyo de la Junta Directiva del PP para trasladar la sede

El líder del Partido Popular, Pablo Casado, deberá contar con la autorización de la Junta Directiva Nacional del PP -máximo órgano del partido entre congresos- para trasladar la sede del partido de la calle Génova, según establecen los propios Estatutos de la formación.

Ante el Comité Ejecutivo del PP convocado para analizar el batacazo electoral del partido en las elecciones catalanas, Casado sorprendió a todos con el anuncio de que el PP abandonará la sede de Génova para romper con el pasado.

"No debemos seguir en un edificio cuya reforma se está investigando en los tribunales", argumentó este martes el presidente del PP, en alusión al juicio que ha arrancado en la Audiencia Nacional por el presunto pago de las reformas de la sede con dinero negro y por el que el extesorero del partido Luis Bárcenas se enfrenta a más años de prisión.

Casado ha encargado al secretario general de la formación, Teodoro García Egea, "el traslado de la sede y todo lo relativo al mismo", según han confirmado a Europa Press fuentes 'populares'. Por ahora, la dirección no ofrece más detalles, ni aclara si se venderá o se alquilará, limitándose a señalar que quieren hacerlo "lo antes posible".

Eso sí, Casado necesitará la autorización de la Junta Directiva del PP para ese traslado de sede y contar con el aval de los miembros de ese órgano de acuerdo a lo que establecen las normas internas del partido.

En concreto, el artículo 1.4 de los Estatutos aseguran textualmente: "La sede nacional del partido se fija en el número 13 de la calle Génova, 28004 de Madrid, y podrá ser trasladada por acuerdo de la Junta Directiva Nacional, sin necesidad de modificar los presentes Estatutos".

La Junta Directiva, máximo órgano del partido entre congresos, está formado por casi 400 miembros del partido y deben reunirse "al menos, una vez cada cuatro meses". Sin embargo, las restricciones impuestas por la pandemia han relajado ese calendario que fijan los Estatutos, dado que este órgano no se reúne desde finales de agosto, tras el relevo de la entonces portavoz parlamentaria Cayetana Álvarez de Toledo.