El Tribunal de Apelación de París aplazó este lunes a septiembre el primero de los dos juicios que el histórico exdirigente etarra José Antonio Urrutikoetxea, 'Josu Ternera', tiene pendientes en Francia.

    El proceso se pospone a los próximos 13 y 14 de septiembre después de que los testigos citados para declarar no hayan podido acudir a la capital francesa por las restricciones sanitarias debido a la pandemia.

    Este proceso iba a ser una repetición del que se celebró en rebeldía en 2010 cuando Josu Ternera estaba en la clandestinidad. Entonces fue condenado a siete años de cárcel por pertenencia a una asociación terrorista y también a su expulsión definitiva de Francia.

Su defensa quería que testificaran el dirigente socialista vasco Jesús Eguiguren; el ex secretario general de Interpol Raymond Kendall; el político norirlandés y antiguo miembro del IRA Gerry Kelly, y David Harland, del Centro para el Diálogo Humanitario. Los cuatro son considerados clave en las negociaciones con el Gobierno español en las que Urrutikoetxea representó a la banda en 2005-2006.

    Eguiguren, "representante del Ejecutivo español" en las mismas, había avanzado la semana pasada que no iba a viajar a París y aunque Kendall vive en Francia, su edad avanzada (87 años) y su delicado estado de salud hacen que esté en duda que vaya a poder hablar en la nueva vista. Pero, según el letrado Laurent Pasquet-Marinacce, las restricciones sanitarias han marcado la ausencia general de los mismos este lunes y provocado que se solicitara y aceptara el aplazamiento.

    Urrutikoetxea, de 70 años, se encuentra desde julio en libertad bajo control judicial por razones de salud. Tras ser arrestado en mayo de 2019 en los Alpes franceses después de 17 años prófugo, se acogió a su derecho de solicitar la anulación de la condena de 2010 para que se organizara una nueva vista en su presencia.

    El histórico exdirigente etarra, cubierto con la obligatoria mascarilla, acudió este lunes a la audiencia con americana y jersey negros y camisa blanca. Este juicio ya estaba previsto que comenzara el pasado octubre, pero su defensa reclamó entonces un primer aplazamiento para que pudieran declarar los cuatro testigos citados.

    La acusación en su contra se basa en pruebas de la presunta implicación de Josu Ternera en ETA entre diciembre de 2002 y 2005 a partir de huellas encontradas en pisos francos de la banda, pero la defensa alega que sus contactos con la banda se debían a que estaba preparando las conversaciones de paz. Su segundo juicio pendiente en Francia también está derivado de una condena en rebeldía a ocho años en relación con su papel destacado en el aparato político de ETA entre 2011 y 2013, en un tiempo en que estuvo en Oslo intentando una negociación con el Gobierno español que no tuvo lugar. El sumario de este caso fue devuelto a la fase de instrucción y se han fijado unas fechas preliminares en junio.

    La sesión de este lunes en París se produce menos de una semana después de que el pasado miércoles Josu Ternera compareciera por videoconferencia desde Francia ante el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz. El magistrado le tomó declaración para comunicarle su procesamiento en el caso de la supuesta financiación de la banda terrorista a través de las "herriko tabernas" y también por el asesinato del directivo de Michelin Luis María Hergueta el 25 de junio de 1980 en Vitoria.

    La justicia francesa ya ha dado el visto bueno definitivo para que sea entregado a España por el atentado contra la casa cuartel de la Guardia Civil en Zaragoza en 1987, en el que fueron asesinadas once personas, entre ellas seis niños, y por el sumario de las "herriko tabernas". El Tribunal de Apelación de París se pronunció igualmente el 6 de enero en favor de la demanda de extradición española para que sea juzgado por el atentado contra el directivo de Michelin, pero Urrutikoetxea ha presentado un recurso ante el Supremo, que todavía no ha fijado fecha para su examen.