El Juzgado de Instrucción número 5 de Madrid emitió el 13 de abril una orden para tomar declaración a Brahim Ghali, jefe del Frente Polisario y presidente de la RASD, el 5 de mayo, además de a miembros importantes del Frente Polisario. La decisión se produce tras una denuncia presentada por un disidente del Polisario, español naturalizado, que acusa a la dirección del Frente de haberlo torturado durante sus cinco meses de detención en las cárceles de Tinduf.
La orden del magistrado Santiago Pedraz se cursó antes de la llegada de Ghali a España tras pedir el 22 de abril El Fadel Brekia, el denunciante, que se investigara la identidad de Ghali. Este ciudadano acusa a Ghali, hospitalizado por covid en Logroño, de "secuestro, detención arbitraria y tortura", informan fuentes. Las autoridades españolas, sin embargo, aún no han considerado oficialmente este proceso judicial, según el digital marroquí Le Desk.
El Fadel Breika había denunciado el año pasado ante el Consejo de Derechos Humanos (CDH) de Ginebra lo que definía como "la represión y los graves abusos cometidos por los torturadores del Polisario contra los habitantes de los campamentos de Tinduf bajo la mirada pasiva de las autoridades del país anfitrión, Argelia".
En el marco de la 43ª sesión del CDH en el Palacio de las Naciones Unidas, Breika había señalado "la responsabilidad legal de Argelia en las atrocidades cometidas por los milicianos del Polisario con el apoyo de los servicios y del ejército argelino contra los civiles saharauis en los campos de Tinduf". Condenó de pasada "el silencio de los llamados defensores del pueblo saharaui sobre los malos tratos y violaciones cometidos contra los saharauis por los dirigentes del Polisario, con la complicidad de los servicios de seguridad argelinos para silenciar, a fuego y sangre, cualquier disonante voz en dichos campamentos".
Bloguero, activista de derechos humanos y disidente del Polisario, Breika acababa de ser liberado de las cárceles del Polisario donde, según declaró, sufrió durante casi cinco meses, con los dos blogueros Mahmoud Zedan y Moulay Abba Bouzid, "abusos físicos y psicológicos por haberse atrevido denunciar las graves violaciones a los derechos humanos y la depravación de los líderes separatistas, así como su explotación de la miseria de las poblaciones de los campamentos para servir sus intereses personales".
Afirma que los tres fueron secuestrados por milicianos armados del Polisario, "por la sencilla razón de que habían condenado en las redes sociales las graves violaciones contra las poblaciones de los campamentos de Tinduf". Posteriormente, según su relato, los tres activistas saharauis serán detenidos, en violación de la ley, en lugares secretos, “donde han sido sometidos a torturas y abusos”.
