La variante delta del coronavirus, que es más contagiosa que las anteriores (la de Wuhan y la alfa), obligará a subir la inmunidad de rebaño "a un 85% o 90%" para tener a la población protegida. Hasta ahora, la inmunidad de grupo se había fijado en tener al 70% de la población vacunada, pero según ha reconocido este miércoles en rueda de prensa la secretaria de Salut Pública de la Generalitat de Cataluña, Carmen Cabezas, ahora habrá que subir ese porcentaje. Se necesitarán más personas vacunadas para vencer a la pandemia. Y no solo en España, sino en todo el mundo, porque esta crisis de salud pública es una crisis global.

"El porcentaje que necesitamos de inmunidad, incluyendo a personas vacunadas y que han pasado la enfermedad, era de un 70%, una cifra clásica en cualquier enfermedad. Pero esta es una variante tan contagiosa, que tendremos que llegar a niveles de un 85% o 90%. Aunque el objetivo de la Conselleria de Salut es vacunar a toda la población", ha dicho Cabezas.

¿Cuándo alcanzará Cataluña este porcentaje? Según Cabezas, "dependerá de las vacunas que se reciban en septiembre". Hasta ahora Salut solo sabe las dosis que recibirá en agosto. "Sabemos que en septiembre recibiremos más vacunas de Moderna, pero no sabemos más", ha dicho Cabezas, quien además ha mostrado su "solidaridad" con Maria Antònia Font, su homóloga en las Islas Baleares, que ayer fue imputada por detención ilegal por confinar a los estudiantes en el 'hotel covid' de Mallorca. "Esa fue una medida de salud pública para garantizar cuarentenas y evitar contagios", ha defendido Cabezas.

Cataluña ya ha administrado un total de 8.500.000 vacunas, el 94% de las recibidas. Eso ha posibilitado que el 52,6% de los catalanes tengan ya la pauta completa y un 61,9%, una dosis. La próxima semana, según Cabezas, se terminará la vacunación de los mayores de 60 años, de los cuales ya tienen las dos dosis el 88%. La estrategia de vacunación avanza a muy buen ritmo tanto en Cataluña como en toda España. Pero las actuales tasas de inmunización aún no son suficientes.

La vacuna tiene una protección muy buena, pero se necesita seguir manteniendo la mascarilla y la distancia social. Entre las 75 muertes ocurridas en las últimas semanas (la cifra de letalidad más baja de todas las olas), el 30,7% de los fallecidos no estaban vacunados y un 17% estaban parcialmente vacunados. El 53% tenían las dos dosis.

Estas bajas cifras de mortalidad contrastan con el alto número de contagios: una media de 4.300 diarios, la más alta de todas las olas. Entre los tres millones de vacunados en las últimas semanas, solo se han contagiado unas 17.000 personas, lo que representa un 0,05%. La vacuna funciona.

Situación epidemiológica

Salut comienza a percibir ya una "bajada de contagios" en los menores de 50 años, lo que indica que "quizás está mejorando la situación", ha señalado la secretaria de Salud Pública, aunque habrá que ver si se "sostiene" durante más días. La presión asistencial en la atención primaria, que "ha bajado un poco", sigue siendo no obstante "altísima": hasta cinco veces mayor que tiempo atrás.

Ello sigue repercutiendo en todo el sistema sanitario. Continúan aumentando las hospitalizaciones y las ucis. Pero cambia el perfil de estos enfermos. "En otras olas, el número de personas en ucis que necesitaban ventilación invasiva era muy alto, ahora es menor. La quinta ola es la que tiene más jóvenes hospitalizados, una media de nueve años menos que en la cuarta", ha explicado Cabezas. La parte buena de esto es que el "promedio de días hospitalizados" es mucho menor que en otras olas. Los hospitales y ucis se vacían antes.

Un 31% de los ingresados por covid-19 en los hospitales catalanes tienen menos de 40 años. En la cuarta ola, este colectivo representaba solo un 10%. Y ocurre lo mismo en las ucis: un 25% de los pacientes con coronavirus en estas unidades tienen menos de 40 años. "Pero necesitan ingresos más cortos", ha insistido esta médica de familia.

Variante delta

La situación "explosiva" de contagios se debe a la variante delta, que es hasta un 60% más contagiosa. Además, tiene un período de incubación más corto que las otras variantes y un tiempo de contagio mayor. "Tiene más eficacia a la hora de infectar las células", ha destacado Cabezas.

Países como Reino Unido, Holanda o Israel también están experimentando, como España, los estragos de la variante delta. Ello ha ido unido a la confianza excesiva y al levantamiento temprano de unas restricciones que aún eran, aún son, necesarias.