Una mujer de 24 años se convirtió ayer en la víctima mortal de la covid-19 más joven en la comunidad. La joven estaba ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Álvaro Cunqueiro, de Vigo, a donde fue trasladada el pasado mes de agosto desde Ourense.

Fuentes del Sergas explican que tenía "mucha patología muy seria de base". La mujer había sido derivada al complejo de Beade ya que r su estado era recomendable el uso de la técnica ECMO, un sistema de oxigenación extracorpóreo que da soporte al corazón y a los pulmones cuando quieren dar un respiro a estos órganos para que se recuperen.

Hasta el momento, la víctima gallega más joven era un chico de 28 años que también había fallecido en el Cunqueiro. Fue a principios de diciembre de 2020 y procedía de la residencia para personas con discapacidad Doral, en Mos.

Es Sergas explica que, tras tanto tiempo ingresada, la joven ya había negativizado. Es decir, ya no daba positivo en las pruebas PCR a COVID porque no quedaban restos genéticos del virus en su organismo. Estas víctimas no se contabilizan en las cifras oficiales de la pandemia.