El PP ya ha abierto un procedimiento interno contra Cayetana Álvarez de Toledo por romper la disciplina de voto tras conocerse que votó en blanco en la elección parlamentaria de Enrique Arnaldo para el Tribunal Constitucional. "Tenemos reglas que se activan para todos y funcionarán exactamente igual", aseguró Cuca Gamarra, portavoz del grupo parlamentario en el Congreso. Fuentes del grupo explican que se ha puesto en marcha ese procedimiento, que supone un expediente disciplinario para estudiar si finalmente se sanciona o no a la diputada. Podría afrontar una multa económica.

La dirección nacional del PP ya advirtió ayer que el partido no pretendía tomar represalias contra la exportavoz y que dejaba en manos del grupo la decisión tras haber roto la disciplina de voto. Génova insiste en que su postura será la de "no hay menos desprecio que no hacer aprecio", y que no está encima de la mesa abrir otro expediente interno con el objetivo de expulsar a la diputada por Barcelona. Todo ello a pesar del contenido del libro que hoy ha avanzado EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, diario perteneciente al mismo grupo de comunicación que este medio.

De hecho, los primeros titulares han caído como un jarro de agua fría entre los diputados populares. Primero, por los “ataques feroces” al presidente nacional al que tacha de “bienqueda”, asegurando que va cambiando sus posiciones para satisfacer a todos sus interlocutores aunque incurra en contradicciones. Tampoco gustan las referencias a Teodoro García Egea, ‘bestia negra’ de la exportavoz, al que acusa de no haber tenido nunca “una idea valiosa” y de haber ejercido una política de “peloteo y pelotas”. Los parlamentarios entienden que las críticas son legítimas, pero que el libro “se pasa de frenada por completo”. Muchos insisten en que Álvarez de Toledo debe abandonar su acta.

Lo que peor ha sentado a muchos de ellos son las referencias a los compañeros de escaño. La diputada por Barcelona asegura que muchos se comportan “como una pandilla” y reprocha “la carrera por los elogios” que muchos emprenden en el chat del grupo parlamentario cuando alguno de los jefes interviene desde la tribuna. “Nos ataca a todos”, se quejan, entendiendo que es “insostenible” que siga en el grupo.

En el libro se reflejan comentarios que pondrían muchos parlamentarios cuando, por ejemplo, termina de hablar García Egea en una sesión de control: “¡Grande!”, “Orgullo”, “¡Maestro!”, dice Álvarez de Toledo, mostrándose muy crítica con la actuación de sus compañeros. Muchos también ironizan con la invitación personalizada que ha hecho a todos los diputados para asistir a la presentación del libro: “Nos reímos por no llorar”, dicen.

Voto en blanco

Con respecto al procedimiento interno, después de que Álvarez de Toledo revelara que emitió un voto en blanco en la votación parlamentaria de los nuevos magistrados del Tribunal Constitucional, la exportavoz aseguró en una entrevista en 'El Mundo' que las experiencias de "política y maniobras indeseables que vivió" se repiten ahora con Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid. Además, reconoció que votó en blanco y que el "reparto de cromos" le parece un "espectáculo desolador" y "contraproducente para el PP" ya que, dice, es autoimpugnatorio.

"Uno no puede exigir que haya una despolitización del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y sin embargo participar e una impúdica, activa y pública politización del Tribunal Constitucional", matizó.

En este punto, añadió que la forma de voto telemático en este momento de la pandemia le parece un "auténtico escándalo" y, a su parecer, se hizo de esta manera para "limitar y restringir la libertad y el secreto de voto de los diputados". "Es un atropello", ha zanjado.