Tras dos años legislatura y con la recuperación económica acechada por los vaivenes de la pandemia, el PP y su líder, Pablo Casado, colocará en estos primeros meses de 2022 a la economía en el centro de su oposición al Gobierno de Pedro Sánchez, al que no van a dejar pasar "ni una".

Los populares quieren poner el foco en el recibo de la luz o el alza en los precios de la cesta de la compra; en el día a día de los españoles que, según recalcan en Génova, sufren problemas a los que el Ejecutivo no pone remedio.

En las últimas semanas, Casado ha reiterado que España está a la cola de Europa en sus cifras económicas y ha advertido de que las buenas perspectivas del Gobierno, que alude entre otros a los buenos datos del empleo, son en realidad un ejercicio de "triunfalismo".

El principal partido de la oposición ha comparado la situación actual con la que se vivió antes de los recortes que el expresidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero tuvo que aplicar en 2010 para evitar un rescate.

Alertan en el PP sobre la situación de déficit y de deuda o acerca de que las previsiones de crecimiento que usa el Ejecutivo superan en dos puntos, del 6,5% al 4,5%, a las que proyectan para España desde la Unión Europea.

Casado ha expresado también esta preocupación ante Bruselas, a pesar de que España ha sido el primer país en recibir los fondos de recuperación y la felicitación de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, de la familia de los populares europeos.

Ponen en duda la gestión de Calviño

Varios eurodiputados del PP han enviado preguntas a la Comisión Europea en las que ponen en duda la gestión de la ministra de Economía, Nadia Calviño, que recientemente ha sido elegida para presidir el Comité Monetario y Financiero Internacional, principal órgano asesor del FMI.

Ante la Comisión, el PP advierte de una deficiente ejecución de los fondos europeos, pone en duda algunas partidas y asegura que la mayoría de las convocatorias van a dirigidas a autonomías del mismo color político que el Gobierno.

A lo largo de este 2021 Casado también ha llevado a Europa otras quejas, como la del Consejo General del Poder Judicial, que el Gobierno quería reformar para que su elección fuese con mayoría simple, a lo que después dio marcha atrás. El PP aboga en cambio por que los jueces elijan de forma directa a la mayoría de los vocales.

La economía, pero también el reforzamiento de las instituciones son dos de los tres ejes que Casado trazó como prioritarios ante su partido en el último Comité Ejecutivo Nacional. El tercero es la sanidad, según han indicado a Efe fuentes de Génova.

En todos estos aspectos el PP pretende mantener una "oposición firme y contundente" a Sánchez, desde la premisa de "no pasarle ni una", señalan también desde el centro de operaciones del Partido Popular.

Al tiempo que denunciarán las medidas del Gobierno que consideren erróneas o su inacción, los de Pablo Casado tienen una prioridad: demostrar que en toda coyuntura son la alternativa y tienen una propuesta que ofrecer.

El objetivo, que ya trazó Casado en la Convención Nacional de su partido, es ofrecer un nuevo contrato social a los españoles.