El Gobierno ha aprobado este martes en su Consejo de Ministros la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) a 1.000 euros brutos al mes (en 14 pagas), así como la extensión de los ertes covid hasta el 31 de marzo. El Ejecutivo da luz verde a dos medidas de corte económico que beneficiarán a cerca de dos millones de trabajadores -en el caso del SMI- y a 104.000 trabajadores -en el caso de los ertes-.

El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicará este miércoles el pacto alcanzado con los sindicatos hace dos semanas -y del que se descolgó la patronal- y el sueldo mínimo pasa de 965 a 1.000 euros brutos al mes (en 14 pagas), con efecto retroactivo a 1 de enero. Dicha medida beneficiará a unos dos millones de trabajadores, según ha cuantificado el propio Ministerio de Trabajo. La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha insistido en que dicho incremento no tendrá un efecto negativo sobre la creación de empleo y ha rechazado las estimaciones de las organizaciones empresariales contrarias a dicha subida. "Los discursos dogmáticos acerca de los efectos negativos del SMI me atrevo a decir que no son reales", ha aseverado.

El ministro de Inclusión, José Luís Escrivá, ha dado cuenta de la extensión por un mes de los ertes covid. "El balance no puede ser más abrumadoramente positivo", ha opinado tras dos años de escudo laboral. El Ejecutivo ha escuchado las demandas de los agentes sociales, pese a sus primeras reticencias, y habilita un mecanismo 'puente' de cuatro semanas para dar cobertura a las compañías mientras planifican y negocian con sus trabajadores un nuevo erte, tras el fin de dos años de prórrogas.

Las ayudas a los ertes covid siguen, aunque se ven rebajadas durante este mes de extensión: Las exoneraciones de cuotas para las empresas bajan del 80% al 60%, siempre que haya planes de formación. Si no hay planes, el porcentaje baja al 20% en empresas de 10 o más trabajadores y al 30% en el caso de tener menos plantilla, lo que supone en ambos casos una reducción del 20%.