La instantánea tan perseguida por Pedro Sánchez se materializaba este martes. En la Moncloa. Al lado de Joe Biden. “España es un aliado indispensable”, indicaba el presidente de Estados Unidos, para después resaltar la importancia de una cumbre, la de la OTAN, la número 32, que acoge Madrid desde este miércoles y que será “verdaderamente histórica”. “Puede contar con España como aliado sólido y amigo”, le decía Sánchez. “Gracias, Pedro. Puedes contar con nosotros también”, correspondía Biden. 

Los dos líderes escenificaban ese relanzamiento de la relación bilateral, que tendrá como concreción más relevante el aumento de la capacidad militar de la base de Rota (Cádiz), que pasará de cuatro a seis buques destructores. Refuerzo que EEUU quiere que se ejecute “mejor antes que después” y que el Gobierno pretende que no se demore mucho, aunque ese cambio del convenio que rige las relaciones entre los dos países debe pasar por el Consejo de Ministros y por el Parlamento, por lo que Sánchez puede encontrarse con la previsible resistencia de Unidas Podemos y de sus socios parlamentarios habituales. 

Biden se reúne con Sánchez en Moncloa

Biden se reúne con Sánchez en Moncloa Agencia ATLAS | Foto: David Castro

La reunión de este 28 de junio de Sánchez y Biden, que se prolongó durante alrededor de una hora en la Moncloa, marca “un hito importante en las relaciones bilaterales” entre Madrid y Washington, en palabras del líder socialista. Porque ambos dirigentes acordaron actualizar y ampliar la declaración conjunta de España y Estados Unidos que llevaba sin tocarse desde hace más de dos décadas, desde 2001, cuando los jefes de la diplomacia eran la ya fallecida Madeleine Albright y Josep Piqué. El texto, de cuatro páginas [aquí en PDF], implica el refuerzo de la colaboración entre los dos países en todas las materias. Pero, singularmente, también el “fortalecimiento de la cooperación en el ámbito de la defensa”. Una prueba, según la Moncloa, de que el encuentro tan ansiado con Biden “no era uno más”.

Washington ya avanzó su propuesta de pasar de cuatro a seis destructores en Cádiz en el avión que traía a su presidente desde Alemania, donde concluyó este martes el G-7, hasta Madrid. Voluntad que se plasma en la declaración conjunta —"el estacionamiento permanente de buques de guerra estadounidenses adicionales en Rota"— y que conlleva mayor presencia de personal militar adicional. La enmienda al Convenio de Cooperación para la Defensa de 1988, que regula el uso compartido de las bases de Rota y Morón, debe ser aprobada por el Gobierno y luego por las Cortes (Congreso y Senado, como regla el artículo 94 de la Constitución). 

Biden, en su comparecencia conjunta con Sánchez en la Moncloa (y sin preguntas), confió en que ese aumento, que "ayudará a la relación bilateral", se haga efectivo “más pronto que tarde”. El líder socialista, ante los medios, confirmó que ambos habían hablado de este asunto, pero fuentes del Ejecutivo añadieron que no esperan que el proceso se dilate mucho, porque ya se estuvo trabajando sobre ello. De hecho, recordaban, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ya viajó hasta el Pentágono en mayo y abordó este tema. El aumento de la presencia de EEUU casa con el objetivo del Gobierno de que se atienda más al flanco sur de la Alianza, según explicaron desde el equipo de Sánchez. El propio Biden citó esa mirada global de la Alianza. La OTAN, dijo, “está fortaleciéndose contra las amenazas que vienen del este y del sur", "está centrada en todos los dominios de todas las direcciones, por tierra, mar y aire". 

"Enfoque integral"

Pero la declaración conjunta también hace referencia a la voluntad de los dos países de “colaborar en un enfoque integral para la gestión de los flujos migratorios irregulares que garantice un trato justo y humano de los migrantes”. Una acotación que cobra mayor importancia por la tragedia ocurrida el pasado viernes en Melilla, en un salto que acabó con la muerte de al menos 23 subsaharianos (las oenegés suben la cifra hasta 37), suceso que el presidente ha lamentado sin lanzar ningún reproche a Marruecos y sin impulsar una investigación de lo ocurrido. 

Los dos países prometen colaborar para "la gestión de los flujos migratorios irregulares que garantice un trato justo y humano de los migrantes" en América y en el norte de África

En el texto [aquí en inglés], España y EEUU prevén coordinarse para abordar las causas de la migración irregular y “fortalecer las vías legales, con especial énfasis en los países de América Latina y el Caribe”, aunque los dos países también reconocen “igualmente la importancia de una cooperación permanente” en respuesta a los “retos” de la migración irregular “en la región del norte de África”. Pero el documento también habla de la seguridad energética y del aumento de la “diversificación geográfica de las fuentes de energía”, justo cuando EEUU en 2022 se ha convertido en el primer proveedor de España de gas, por delante de Argelia

Biden y Sánchez mostraron sintonía en todo momento. Desde la llegada a la Moncloa de la ‘Bestia’, el vehículo blindado del presidente americano, a las 16.12 horas (con casi cuarto de hora de retraso), cuando fue recibido a pie de escalera por el líder socialista. Tras el saludo protocolario, comenzó la reunión de ambos primero y después ya de los dos con sus equipos: Biden estuvo acompañado de su secretario de Estado, Anthony Blinken; el jefe del Pentágono, Lloyd Austin, y el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, y Sánchez, por sus ministros de Exteriores y Defensa, José Manuel Albares y Margarita Robles, además de dos figuras clave en su Gabinete: el secretario general de Asuntos Económicos y G-20, Manuel de la Rocha Vázquez, y la directora de Exteriores, Emma Aparici. 

Biden define el encuentro como "muy cálido", agradece a Sánchez su "liderazgo" y le agradece su despliegue en Letonia y la acogida de refugiados ucranianos

El encuentro fue “muy cálido”, en palabras del estadounidense, quien agradeció a Sánchez su "liderazgo" y la "hospitalidad" de España con los militares que están en las bases españolas. Y al Gobierno le cumplimentó por su mayor implicación en Letonia (son 592 los efectivos allí y 1.477 los militares desplegados por España en las cinco misiones de la Alianza, precisó Sánchez), así como la recepción de 140.000 refugiados ucranianos, “testimonio del espíritu de determinación de los españoles”. "Y hoy estamos juntos para defender nuestra seguridad compartida y enfatizarla, fortaleciendo nuestra alianza transatlántica y respondiendo al reto que afrontamos hoy", señaló durante la comparecencia. También destacó la cooperación de España y EEUU en una región crucial para ambos, Latinoamérica y el Caribe (para el robustecimiento de la "democracia, el Estado de derecho y la prosperidad económica"), y el deseo de una mayor colaboración en África para “promover la estabilidad y el crecimiento económico”. 

“Somos aliados, somos socios estratégicos, somos países amigos”, correspondió Sánchez. Los dos líderes fueron muy duros con Rusia y con Vladímir Putin y su ataque obliga, convinieron, a reforzar la seguridad colectiva. Es, de hecho, lo que ha revitalizado la OTAN, señaló el jefe del Ejecutivo. Tras la comparecencia, el dirigente demócrata, que visitaba por primera vez España desde su acceso a la Casa Blanca, marchó hacia el Palacio Real, para su audiencia con Felipe VI. El Rey lo había recibido a pie de pista en Torrejón de Ardoz después de que el Air Force One hubiera tocado tierra a las 15.04.

La cita con Biden en la Moncloa no fue la única del día para Sánchez. Por la mañana, mantuvo encuentros bilaterales con los primeros ministros de Australia y Nueva Zelanda, Anthony Albanese y Jacinda Ardern, y, por la tarde, tras el mandatario estadounidense, con la ‘premier’ de Islandia, Katrín Jakobsdóttir. Y con Jens Stoltenberg, jefe de la Alianza, almorzó y recorrió las instalaciones de Ifema que acogen oficialmente la 32ª cumbre de la OTAN a partir de este miércoles. La reunión “transformativa” de la organización para Stoltenberg. “Histórica” para Biden y, probablemente, para todos los líderes.