El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha pedido a la ministra de Justicia, Pilar Llop, que desmienta el "chantaje" al que está sometiendo el Gobierno a Carlos Lesmes, presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Feijóo ha dado por buenas las presiones que 'El Mundo' publica este lunes, según las cuales la Moncloa estaría coaccionando a Lesmes para que elija a los dos magistrados del Tribunal Constitucional (TC) que le corresponden al CGPJ. "Sin nombramientos, Lesmes que se olvide de la plaza de [Alfredo] Montoya en el TC", se puede leer en el rotativo madrileño.
El líder del PP ha afirmado en un desayuno-informativo celebrado este lunes en Madrid que, tras leer esto "entrecomillado", requiere que la ministra de Justicia dé explicaciones y desmienta que el Gobierno está presionando a Lesmes. “Las amenazas y los chantajes por parte del Gobierno al CGPG, a compañías o a la oposición son inadmisibles. No se puede chantajear ni amenazar a nadie”, ha declarado. Según el líder del PP, el Gobierno está intentando "controlar" el Constitucional para evitar que algunas de las leyes recurridas ante ese organismo puedan ser declaradas contrarias a la Carta Magna (aborto, eutanasia, 'ley Celáa'...). Las palabras del líder del PP ante las cámaras suponen, de facto, una presión obvia para que Lesmes no nombre a los dos magistrados.
Cuatro de los 12 magistrados del TC agotaron su mandato el pasado 12 de junio y el Gobierno y el CGPJ tienen que elegir dos cada uno. El Ejecutivo confía en que el poder judicial nombre, antes del día 13 de este mes, a los dos que le corresponden y ha avisado de que Sánchez hará su parte.
Lesmes ha convocado un pleno del CGPJ para el próximo jueves y los vocales podrían pactar la designación de dos magistrados (supuestamente uno progresista y otro conservador). Si el poder judicial y el Gobierno renuevan los cuatro nombres, la mayoría del TC cambiará de conservadora a progresista.
Este episodio es uno más de la odisea por la falta de renovación global del CGPJ, cuyos vocales tienen a la vez su mandato caducado desde hace casi cuatro años y reflejan la mayoría conservadora que tenían porque se conformó con Mariano Rajoy en la Moncloa.
