De la operación hostil de acoso y derribo a Ciudadanos, que puso en marcha la anterior dirección del PP, al modelo andaluz, de absorción por integración, entre caricias y ofertas atractivas, en un momento de descomposición de los naranjas. La vía de Juan Manuel Moreno en Andalucía, que llama a Cs "partido hermano", es asumida para toda España, confirman fuentes de Génova. “El modelo andaluz es ya el modelo español”, zanjan desde la dirección nacional del PP. Alberto Núñez Feijóo abrirá las listas de las municipales y autonómicas a "todo el talento" que quiera integrarse desde otros partidos, con una oferta clara a los cargos de Cs. "Tienen las puertas abiertas para incorporarse al PP", aseguran desde la ejecutiva nacional.

En Génova asumen que el modelo andaluz ha sido un éxito. El PP logró absorber todo el voto de Cs en las últimas autonómicas y cimentó su victoria expandiéndose en el centro. Aportan además otra lectura. Hubo votantes socialistas desencantados que se fueron a Cs en su momento y que luego no tuvieron reparo en coger la papeleta del PP. Aspiran a que eso vuelva a ocurrir.

Moreno, con un mensaje de moderación, puso en marcha una estrategia que ahora el partido asumirá para las municipales y autonómicas del próximo mayo, que mira al centro y también a la derecha, con guiños a quienes se fueron a Vox y ahora lamentan el desnortamiento del partido tras la última crisis interna por la salida de Macarena Olona.

Guiños a alcaldes y concejales

Ya hubo en las andaluzas de junio una oferta firme a Cs para concurrir en las mismas listas, con los referentes del partido integrados en las candidaturas del PP, aunque fueran como independientes. La dirección de Inés Arrimadas rechazó esa propuesta y Cs desapareció del Parlamento andaluz tras perder de una tacada 21 escaños.

La oferta, insisten en Génova, vuelve a estar sobre la mesa. El exlíder de Cs en Andalucía, Juan Marín, nombrado este martes por el Gobierno andaluz presidente del Consejo Económico y Social de Andalucía, celebró varias entrevistas en las que volvió a defender que las listas conjuntas eran una buena idea. El plan de Feijóo, diseñado por el coordinador general del PP, Elías Bendodo, el gran artífice de la absorción de Cs en Andalucía, es hacer una oferta a los cargos naranjas para que se pasen a las listas populares. Que se afilien o no, avisan, es “una cuestión de tiempo”. El propio Marín, referente de Cs en Andalucía, dos veces candidato del partido en las andaluzas y exvicepresidente andaluz, ha comunicado que, de momento, mantiene su afiliación a Cs. En el PP dan por hecho que su baja acabará consumándose.

El PP sabe que las municipales son elecciones muy pegadas al territorio y cuentan con que algunos de los candidatos de Cs pueden ser una buena baza. El partido de Inés Arrimadas sumó en las locales de 2019 un total de 2.788 concejales y 1,8 millones de votos. Absorber todo ese voto supondría dar el ‘sorpasso’ al PSOE y quedar por delante en la próxima cita electoral de mayo, calculan desde la dirección nacional de los populares. Dan por descontado que el voto que el PSOE perdió para irse al partido de centro no volverá a Pedro Sánchez y además cuentan con que los socialistas tienen una gran debilidad, con las candidaturas a su izquierda fragmentadas, con tensiones entre Podemos e IU para elaborar marcas conjuntas y el proyecto de Yolanda Díaz aún en el cajón.

La cúpula del PP, ya con el piloto de las municipales y autonómicas activado, tiene sondeados los territorios y echado el ojo a alcaldes de Cs o concejales del partido que podían pasarse a las filas populares. No hay nada casual en toda esta estrategia de fusión por absorción del partido liberal que fundó Albert Rivera.

ARRIMADAS SE VA A GALICIA

En el equipo de Arrimadas ignoran los cantos de sirenas que llegan desde las filas populares. Aseguran que no temen un trasvase de sus cargos municipales a las listas del PP porque ahora mismo quienes quedan en el partido son los más convencidos. Descartan que, tras la fuga andaluza, otros perfiles de renombre como el de Begoña Villacís en Madrid sucumba a las ofertas.

Mientras se prepara la asamblea de refundación, Arrimadas incluirá en su agenda la presentación de candidatos a las principales ciudades españolas. Su primer destino será precisamente Galicia, tierra de Feijóo y una de las comunidades más difíciles para Cs tras País Vasco y Navarra. Allí estará la presidenta del partido este sábado presentando a los principales candidatos de mayo. A partir de noviembre tiene agenda para presentar cabezas de listas en Andalucía, donde estará el 12 y 13 de noviembre, Cataluña y la Comunidad Valenciana. “No hay ninguna intención en el partido en acabar en las listas del PP”, zanjan.

Marín, tentado como portavoz

No ha existido una llamada a Arrimadas ni una oferta formal desde la cúpula del PP pero insiste Génova en el mismo mensaje de que las listas están “abiertas a sumar y al talento”. En Andalucía, ya antes de las autonómicas varios cargos importantes saltaron del barco y se dieron de baja en el partido. Moreno cumplió la palabra dada a Marín y no incorporó a algunos de esos nombres en sus candidaturas, aunque confiesan ambos que hubo quien lo intentó. Ahora las circunstancias, advierten en el PP, son diferentes. El presidente andaluz ha incorporado al organigrama de la Junta de Andalucía a la mayoría de cargos de Cs en la coalición. Ha enterrado al partido que fue su socio y al que engulló dando puestos públicos a todos sus referentes. Queda la expresidenta del Parlamento, Marta Bosquet.

El último fichaje fue el de Marín. Se dio a conocer este lunes, el mismo día que Cs presentaba el calendario de su asamblea de refundación, el 13 y 15 de enero. No fue casualidad. La incorporación de Marín ha sido la última anunciada por el PP y empañó una jornada en la que Cs pensaba coger algo de aire. El exdirigente comunicó a Arrimadas por teléfono, como contó este periódico, que iba a aceptar la oferta del PP y que seguiría afiliado al partido. Pese a que el golpe anímico es menor que si directamente se hubiera dado de baja no es ningún secreto que en Cs hubieran preferido otro escenario.

Marín admite que lleva desde el 19 de junio alejado de la vida orgánica del partido, dimitió tras la debacle electoral, y se queja de que la gestora, constituida para evitar el vacío de poder en Andalucía mientras se producía el desembarco de cargos de Cs en el Gobierno del PP, no le ha solicitado su presencia ni apoyo en ningún acto del partido. Sí que confirman fuentes próximas al que fue líder andaluz que obtuvo ofertas para ser candidato para las alcaldías de Sevilla y Cádiz y que rechazó ambas propuestas porque “no tenían sentido”. También pudo elegir ser candidato en su municipio, Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), aunque al parecer esa oferta ni siquiera llegó a formalizarse. Sí que tuvo el exvicepresidente andaluz muchas ofertas jugosas del Gobierno andaluz y del presidente Moreno, desde la portavocía del Gobierno, a viceconsejerías, el Defensor del Pueblo o la Autoridad Portuaria de Cádiz en caso de que su actual presidenta, Teófila Martínez, retornara a la vida municipal como candidata del PP en la capital gaditana.