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Una lata de refresco. Ese es el espacio que se necesita para aglutinar a todas las partículas de coronavirus a escala mundial, según el matemático Kit Yates de la Universidad de Bath. Sin embargo, el alcance real que tiene no cabe siquiera en un continente, es universal. Precisamente de esta magnitud se ha debatido en el Club Diario Levante, donde se ha celebrado un nuevo desayuno informativo en torno a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de la ONU, organizado por Levante-EMV con patrocinio global de Facsa, la Autoridad Portuaria de València y Caixa Popular, y la colaboración especial de Ribera Salud. En este caso, durante la sesión se ha abordado el objetivo 3, que marca la necesidad de garantizar salud y bienestar para todas las personas.

Para ello, se contó con la participación de M.ª José Mira, secretaria autonómica de Modelo Económico y Financiación y comisionada de Presidencia de Generalitat para coordinación de suministros frente a la covid-19 en la Comunitat; la también secretaria autonómica Concha Andrés, responsable de Eficiencia y Tecnología Sanitaria; Josep Benlloch, alcalde de Vila-Real y presidente de la Delegación Española en el Congreso de Poderes Locales del Consejo de Europa; Elisa Tarazona, consejera delegada de Ribera Salud; José M.ª Martín Moreno, catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universitat de València; y Ernesto Santateresa, director de calidad ambiental y responsable del proyecto Covid Water en la empresa Facsa.

Anticiparse al «bicho»

En el encuentro, celebrado a caballo entre la tercera y la cuarta ola de la pandemia, los ponentes coincidieron en que «no saldremos de esta hasta que la última persona salga» y hablaron de la importancia de la prevención a la hora de abordar una emergencia sanitaria como es esta y en ser «pro activos y no reactivos» ante el virus: «Hay que ir por delante, no por detrás de él». Asimismo, se habló de la importancia de la vacuna y los beneficios de «flexibilizar las patentes» y al que José Mª Martín añadió la idea de «segmentar las vacunas por grupos de edad y necesidades médicas».

« Las aguas residuales son un ‘bigdata’ complejo, dan mucha información»

Ernesto Santateresa - Director de calidad ambiental y del proyecto covid water de Facsa

Las primeras intervenciones fueron de las secretarias autonómicas Concha Andrés y M.ª José Mira. Andrés señaló que «la respuesta ha sido la adecuada. Hoy tenemos 34 casos por cada cien mil habitantes. Hemos trabajado en tiempo record, formado al personal, contratado a 6.500 personas... El presupuesto en Sanidad ya supone el «50 % de las cuentas totales de Generalitat». Y todo ello ha permitido vacunar hoy a 60.000 personas en un dia». Incidió en los «60 millones de euros invertidos en tecnología» durante este último año para implementar la atención telefónica y a través de internet, «y ahora viene la videollamada».

« Comprobado que la salud no lo es todo pero sin salud todo lo demás es nada»

José María Martín Moreno - Catedrático de Medicina Preventiva

Por su parte, Mira, que se encargó de coordinar el abastecimiento a toda la Comunitat con mascarillas, EPIs de protección para los sanitarios y profesionales,y otros productos, apuntó que al principio de la pandemia se encontraron con dos problemas. El primero fue que, aunque tenían las infraestructuras, no disponían de herramientas de protección. El segundo, la «dependencia internacional enorme» al tener que importar mascarillas de otros países cuando ni siquiera habían comprobado la calidad de las mismas. «Tener que comprar en China mascarillas o respiradores nos debilitó. Hubo que romper las reglas de los contratos, pero con los meses ha sido posible «fortalecer el sistema industrial valenciano» para tener una economía independiente. «Hoy ya no importamos nada, tenemos más resiliencia y una reserva estratégica de material para seis meses cuando se aconseja para dos».

Tecnología y colaboración

Elisa Tarazona aportó, desde su experiencia como consejera delegada de Ribera Salud, que la colaboración publico-privada ha sido «esencial» durante la pandemia: «cuando trabajamos juntos somos mejores, porque tenemos un objetivo común que es responder a las necesidades de las personas. La alianza entre lo público y lo privado debe llegar lo más lejos posible». El grupo, presente en Galicia, Madrid, Extremadura y Comunitat Valenciana «pudo centralizar recursos, preparar respuesta y ponernos a disposición de la Administración. Cuando sumamos somos mejores».

« Para conseguir mascarillas dependíamos de otros países pero se ha reforzado la industria»

Mª José Mira - Secretaria Autonómica de Modelo Eonómico y Financiación

Con todo, Tarazona advirtió que ahora viene la pos pandemia, que son las «listas de espera quirúrgica» y más consecuencias «que todavía desconocemos». Según Tarazona, los costes de atención sanitaria «se elevarán», así como también se tendrán que atender «secuelas pos covid». Para eso, apunta al papel clave que jugará la tecnología, con programas para «rehabilitar a distancia a través de proyectos pioneros y cuidados a través de la voz o la telemonitorización». La gente tiene miedo a ir a los hospitales y la teleasistencia cobra importancia. «Por eso nos gusta ser una empresa tecnológica, con variables con inteligencia artificial, historia clínica electrónica... Atendemos a gente inglesa en Torrevieja con el cuidador en Londres».

Crisis sanitaria: Heroicidades, tecnología y deficiencias

La pandemia del coronavirus ha traído muchos cambios, muchas acciones y, sobre todo, muchos aprendizajes. Durante el desayuno informativo donde se trató el ODS Salud y Bienestar, el catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universitat de València Jose Mª Martín Moreno, opinó que en la gestión de la pandemia no todo ha relucido. «Ha habido heroicidades, tecnología y deficiencias». A pesar de que el profesor recalcó que se ha hecho lo mejor que se ha podido y se está yendo «por el buen camino», también fue crítico con la forma de ejecutar (precipitada por la urgencia) los protocolos durante este año de pandemia. «Las UCIs han resultado ser más débiles de lo que pensábamos y muchas enfermedades y trastorno de salud mental se están relegando, la pandemia se lo está comiendo todo», apuntó. En definitiva, el catedrático defendió su postura diciendo que ha habido «muchos principios sin continuidades y muchas continuidades sin principios».

Por su parte, el catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública José M.ª Martín Moreno aseveró que «la salud no lo es todo pero sin salud todo lo demás es nada» y en este sentido, aludió a la dicotomía entre salud y economía que plantea el número 3 de los ODS. «Tenemos amplio espacio de mejora. El sistema ha salido más fuerte en teleasistencia, pero seguimos débiles en UCIs y en personal, y enfermedades crónicas no transmisibles se están relegando por la pandemia». Aunque «vamos en la buena dirección», Martín ve que las desigualdades están aumentando, pues «hay una diferencia de 31 años en la esperanza de vida entre países, eso es una barbaridad».

« Sin consistorios se garantiza la despoblación, pues son vertebradores del territorio»

Josep Benlloch - Alcalde de Vila-Real.

Asimismo, fue crítico con la gestión internacional de la pandemia y destacó el valor de ser «pro activo y no reactivo». «Vamos detrás del virus y no nos hemos anticipado», añadió. Al tiempo puso sobre la mesa la conveniencia de flexibilizar las patentes y segmentar los grupos de vacunación. Mira matizó esta idea, aportando que el debate debería estar «más en la fabricación de las vacunas que en la patente misma». Con todo, apoyó la visión de Martín Moreno añadiendo que «cuando la vida está en juego, las reglas de las patentes tienen que cambiar, porque las vacunas tienen que poder llegar a todos los rincones del mundo».

« Hubiera sido imposible atender a la población sin colaboración público-privada»

Elisa Tarazona - Consejera delegada de Ribera Salud

Por su parte, Ernesto Santateresa, de Facsa, explicó a los presentes el proyecto Covid Water que llevan desarrollando desde principios de la pandemia. Una iniciativa para detectar y medir el de coronavirus en las aguas residuales y así prevenir posibles brotes y contagios que ha sido, «nuestra manera de aportar a la sociedad» y que se ha puesto en marcha en municipios y ciudades de todo el territorio.

El proyecto, desarrollado junto a diferentes entidades públicas y académicas, ha permitido orientar sobre el volumen del virus en las aguas comparándolo con la incidencia acumulada de cada localidad. «El agua es un bigdata complejo, da mucha información y en este sentido esta ha sido una iniciativa pro activa», dijo Santateresa: «No hay que reaccionar ante estas situaciones, sino estar preparado para afrontarlas. Por otra parte, Josep Benlloch, alcalde de Vila-Real y también presidente de la Xarxa Valenciana de Ciutats per l’Innovació, destacó el papel de los ayuntamientos que han sido «departamentos de emergencia» y la atención primaria de los consultorios, un servicio «esencial para las personas».

« Hemos invertido 60 millones en tecnología para hacer frente a todas las necesidades»

Concha Andrés - Secretaria Autonómica de Eficiencia y Tecnología Sanitaria

Benlloch quiso abordar el problema de la despoblación en las áreas rurales, que «puede acentuarse tras la pandemia». Así, explicó que es necesaria una igualdad de atención sanitaria rural para que actúe como elemento motivador para quedarse y puso en valor el cumplimiento de la carta de autonomía local para no «ahogar el poder local» y empoderar a los municipios. «Si no hay ayuntamientos, se garantiza la despoblación, pues son vertebradores del territorio», concluyó.