El surafricano Brad Binder (KTM), vencedor del Gran Premio de Italia de Moto3 en el trazado de Mugello y sólido líder de la categoría reconoció que fue "una carrera completamente loca, en la que resultó muy difícil plantear cualquier tipo de estrategias".

"Nos estuvimos cambiando de posiciones constantemente y en ocasiones incluso resultó muy peligroso ya que nos tocamos en ocasiones al final de recta pero en la última vuelta pensé que si podía estar liderando el grupo tendría más opciones de victoria", aseguró el piloto surafricano.

"Es una victoria sensacional que me permite aumentar la ventaja y sumar la tercera consecutiva de la temporada gracias a la moto que me ha dado mi equipo para la carrera y eso que no fue un fin de semana fácil pero la experiencia de tres victorias aquí en los cuatro últimos años lo hemos podido lograr", recalcó Binder, quien con los pies en el suelo recordó: "Todavía nos queda mucho trabajo ya que apenas llevamos seis carreras".