Com cada any, el divendres anterior al primer diumenge de setembre, Vila-real acull amb goig la Mare de Déu de Gràcia, "mare dolça, d´Àngels reina coronada", per així començar les festes en el seu honor. Com descriu el llibret, "La Ribera de Mijares habitada de la Divina Gracia", la devoció a la Mare de Déu ha estat present en la història d´aquesta vila des d´antic.

L´edició facsímil de l´obra, escrita per "Fr. Juan Bautista Inza, Predicador, é Hijo Menor Descalzo de la Provincia de San Juan Bautista del Reyno de Valencia", a més de presentar el novenari a la patrona de Vila-real, ofereix també la "Descripcion del sitio de su Aparecimiento, Origen, y Progresos de su Culto, con un Elogio á la Prodigiosa Imagen, y su hermoso Santuario".

El P. Inza situa d´aquesta manera l´ermita de la Mare de Déu de Gràcia de Vila-real: "Yace el bellisimo, y muy devoto Heremitorio de la Reyna, y Senyora de Gracia en la apacible Ribera del Mijáres, distante de Villa-Real poco mas de media hora, en el Secano de nuestra Villa". El conjunt, "a mas de la habitacion de los Hermitaños ó Caseros", conté a més els "Aposentos, una gra Sala, y Cocinas, Refectorio, su Pozo de agua de Mijáres, su huerto". Pel que fa a la bellesa del lloc, el P.Inza destaca la "praderia agraciada" amb "mil fragantes flores, y salseras y ervecitas".

El P. Inza descriu així el trobament de la imatge de la Mare de Déu de gràcia: "Pastoreava su rebaño, junto a las corrientes de el Rio Mijáres, uno de aquellos Pastores antiguos, candidos por la inocencia de sus costumbres. Quando ved aií, que en uno de aquellos felices dias se le apareció una Senyora agraciada, que es muy posible que mandase al Pastor, diese parte á la ilustre Villa, de lo que acabavan de ver sus ojos". D´aquesta manera, "Clero, y Villa acudió en Procesion al afortunado sitio, y hallando en él á la Soberana Imagen, la trageron con toda reverencia, y jubilo del corazon al Pueblo".

La imatge de la Mare de Déu fou dipositada al temple, "mas al otro dia se restituyó al mismo sitio, practicando esta ceremonia tantas veces, quantas era menester, paraque la Villa entendiese ser voluntad de Dios, y de la Madre Virgen, que su Santa Imagen fuera adorada en el lugar mismo de su Aparecimiento". Per això, davant el retorn reiterat de la imatge allà on es va aparèixer, "levantó la Villa una hermosa Hermita".

En quant a la talla de la Mare de Déu de Gràcia, el P.Inza diu que és "morenita, bien encarnada, de madera, aunque no he averiguado de que especie de arbol. Sus ojos los tiene grandes, y muy vivos, aunque modestos", i amb un rostre bellament somrient: "a las veces parece á la piedad de mis compatriotas, que está la Santa Imagen con una risa, y alegria desusada. Tiene la Virgen de Gracia de longitud tres palmos, y dedos: En la cabeza ciñe una muy hermosa corona, en la derecha empunya una bolita con su cruz, y en la siniestra colocado al Divino Infante".

La imatge va protegir Vila-real de la pesta, quan "el año 1757, por el mes de Mayo, empezaron las enfermedades de nuestra Villa", com ho certificava la "Junta de Medicos, tres de fuera, el de Alcora, el de Nules, y de Burriana, con otros tres que tenia la Villa". Per això es determinà "se tragese á Nuestra Senyora de Gracia, y llegada esta Soberana Reyna por la tarde en las casas, donde havia enfermos de cuidado, detenian la Sagrada Imagen, todo el tiempo que era menester". En desaparèixer la pesta i com a signe d´agraïment, "en atencion á tan soberano beneficio la muy Ilustre Villa en este mismo año de 1757 votó la fiesta á Nuestra Senyora la Dominica primera de Setiembre, y esto perpetuamente". Per això, "el viernes en la tarde se trae la Santa Imagen desde su Hermita á la Parroquial Iglesia, con asistencia de Clero, Villa, Comunidades Religiosas, los quales, con un inmenso concurso de Pueblo, salen a recibir á su Alteza á la boca del camino ó Palafanga".

A més de Vila-real, la Mare de Déu de Gràcia és també patrona d´Altura, Gorga, Cinctorres, Viver, Simat de la Valldigna, Pina de Montalgrao i Biar, i a més, se celebra també a Morella, L´Énova, Peníscola, Gandia, Sogorb, Traiguera, Vallibona i Sorita, segons queda documentat al llibre, "Més enllà del nostre poble", una obra escrita per mossèn Manuel Martín Nebot, actual capellà de la parròquia de Sant Vicent d´Almassora.

Que la presència de Santa Maria, ajude els fills d´aquesta vila, que l´aclama amb els Goigs: "De la Gràcia la més plena/ sou Maria celestial/ Verge humil, Verge morena,/ Mare de Vila-real".