«Ha quedado un mezcladillo muy interesante, que se ha trabajado con mucha naturalidad. Ahora lo que queremos es que la gente se divierta y lo baile. Con el añadido de que está hecho en valenciano, que es esencial. Sinceramente, si no, no nos habría interesado». Bajoqueta Rock es una banda más que conocida en los escenarios valencianos. Caen bien y son especialmente graciosos. Con los años vencidos casi todos están calvos, algún canoso y Paco Lluis sigue siendo el melenudo del grupo. Pero su música no falta en los escenario de la Comunitat Valenciana. A partir de hoy, a las dos y siete minutos de la tarde, más o menos, serán los que interpreten la canción que, calidades aparte, ha sido durante años la auténtica sintonía del disparo: el «Valencia en Fallas» que, durante décadas, cantó Vicente Ramírez y que ahora llegará actualizada y punteada. «Es un pasodoble en toda regla, perfectamente marcado, pero cuando nos ofrecieron la posibilidad de hacer una versión nos dimos cuenta que se podía hacer. Había que meterle una guitarra eléctrica y darle un nuevo ritmo». Se quedan con las ganas, eso sí, de incluir la letra que habían gestado para la ocasión, mucho más fallera, donde se hablaba del casal, el truc y la «cassalla» y en el que Valencia en Fallas ya no era una fiesta incomparable, sino «una festa per al poble» y que ya no tendrá un «encanto inolvidable», sino que estaba «il·luminada per les flames». Pero los herederos del autor no autorizaron más que una traducción lo más parecida a la actual. Eso sí, Bajoqueta Rock podrá interpretar esa versión si actúan en directo.

Cuando presentaron su programa de intenciones, Compromís abogaba por recuperar las músicas tradicionales valencianas en la megafonía. Hay que valorar, sin embargo, qué tipo de audiencia tiene la «mascletà». Es decir, gente con ganas de dar brincos, con la adrenalina a tope y con ningún otro interés que bailar, corear y abrirse paso. No vale, pues, cualquier canción. Esta versión es el primer paso dentro del proyecto de Pere Fuset de poner en valor la música balconera. «Durante muchos años hemos pensado que la megafonía de la Plaza del Ayuntamiento antes del disparo de una mascletà- 15 minutos los días laborables y 30 minutos los fines de semana- podía ser una buena plataforma de promoción de la música valenciana y de promoción de los músicos valencianos, y este damos el primer paso». La elección de Bajoqueta Rock hace justicia a los músicos de Valencia ciudad y Riba-roja especialmente «porque son una banda muy conocida y muy veterana, que se lo merecían».

Ni cortos ni perezosos, los músicos se asomaron al balcón para «playbackear» la canción. Lo curioso es que, aunque la megafonía estaba puesta discretamente, se veían desde abajo gestos de aprobación.