La presidenta del Ateneo Mercantil, Carmen De Rosa, prohibirá las reuniones periódicas que organiza la Fundación Francisco Franco en un reservado de la cafetería de la entidad valenciana de las que ha tenido conocimiento este diario. Ayer Levante-EMV le preguntó si tenía conocimiento de estos encuentros periódicos, que la presidenta aseguró ahora prohibirá.
De Rosa, dimitió el viernes de su puesto de copresidenta de la falla El Mercat, después de que trascendiera que la comisión iba a reconocer a la fundación como «fallero de honor».
La recientemente reelegida presidenta del Ateneo Mercantil presentó su dimisión «de forma irrevocable» al «no compartir los valores» de la fundación, cuyo acto de reconocimiento quedó finalmente anulado. La noticia salió a la luz pública por el correo electrónico que Ricardo Alba, secretario hasta hace unos días de la fundación, envió a un socio de la misma para invitarle al acto que se iba a celebrar en la carpa de la comisión el 16 de marzo. A la efeméride iban a acudir como invitados especiales Carmen Franco Polo, duquesa de Franco, acompañada de su hija, Carmen Martínez Bordiu Franco y de su nieto Luis Alfonso de Borbón. Este reconocimiento había sido auspiciado por el otro presidente de la comisión fallera, Federico Bisquert, quien desde el primer momento ha asegurado que De Rosa conocía esta iniciativa y que el único motivo que le ha llevado a dimitir era anticiparse a que la cesaran en la junta de la falla como estaba programado por otro motivo: el proceso judicial por el que la falla podría acabar pagando 56.000 euros, del que culpa a De Rosa.
Reuniones franquistas
Ahora De Rosa asegura que va a evitar cualquier tipo de reunión franquista en el Ateneo Mercantil, donde según ha podido saber este diario, cada 20 días un grupo de personas vinculadas a la fundación que ensalza la figura del dictador organiza en València reuniones a las que invita a personas de la ciudad. La presidenta señaló que estos encuentros se celebran en el reservado de la cafetería que está gestionada por una concesionaria y por lo tanto no directamente por el Ateneo. Sin embargo, Carmen de Rosa, aseguró ayer a este diario que pedirá a la concesionaria que no se haga ninguna reserva a nombre de la fundación ni a personas afines.
Sin embargo, la sombra de estas personas cercanas a la Fundación Francisco Franco no queda ahí. Según diversas fuentes consultadas por este diario, quien sería el delegado o representante de este grupo franquista -y asiduo a las reuniones- es un socio del Ateneo, Manuel Salvador, quien fue una de las personas que durante las elecciones de la presidencia del Ateneo recogió firmas en la entidad en favor de la junta directiva presidida por De Rosa tras diversas acusaciones de falta de transparencia en el desarrollo de sus funciones.
La actual presidenta aseguraba ayer a este diario que conocía a este socio y que se celebran estos encuentros desde que forma parte del Ateneo pero que desconocía que fuese delegado de la fundación «e incluso fuese miembro de la misma». «Lo conozco a él y a su mujer. Es socio desde hace poco, desde después del verano. Pero nunca se me ha presentando como miembro de la fundación», señalaba la presidenta. Lo que sí confirmó a este diario es que miembros de estos encuentros en el reservado del Ateneo han frecuentado la comisión fallera y que incluso en una ocasión acabaron cantando el «Cara al sol», por lo que ella les llamó la atención.
