La Junta de Gobierno Local fue el escenario en el que la concejalía de fiestas y su oposición municipal escenificaron desencuentros y discrepancias. Así, mientras unos anunciaron gestiones, otros denunciaron carencias.

El concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, anunció la oferta de un nuevo programa piloto de ayudas para que las comisiones falleras puedan insonorizar sus casales con el objetivo de continuar mejorando la convivencia entre el mundo fallero y el resto del vecindario de la ciudad durante todo el año. Este programa empieza con una partida de 50.000 euros para este mismo año para, sobre resultados, evaluar la posibilidad de realizarle mejoras «y, si procede, ampliar la dotación económica para que las ayudas lleguen a más comisiones falleras en próximas convocatorias» aseguró Fuset. La cantidad máxima que aportaría el ayuntamiento serían 6.250 euros por cada expediente de obra en función a diferentes baremos.

Hay que recordar que, con la nueva legislación, el ayuntamiento lleva seis años sin poder convertirse en avalista para la adquisición de nuevos casales (lo que, por lógica, incluía la insonorización correcta de esos locales adquiridos en propiedad) y que la única posibilidad era la de ayudar a evitar los ruidos de las plantas bajas, algo que el edil considera «básico para mejorar la convivencia. Después de haber conseguido reducir en un 62 por ciento las quejas vecinales durante las pasadas Fallas queremos continuar impulsando estímulos para favorecer la convivencia durante todo el año». La intención es «comprobar y medir la disposición real de las comisiones falleras de Valencia y el volumen de peticiones con un programa piloto para analizar sus efectos antes de aumentar la dotación económica global en futuras ediciones».

Críticas del PP

El Partido Popular, por contra, centró sus comentarios en la crítica hacia dos aspectos. Si ayer se aprobaban partidas correspondientes a subvenciones de monumento fallero del pasado ejercicio, correspondiente a 21 comisiones, la pregunta lógica era saber cuántas quedan por cobrar el célebre 25 por ciento. «Sesenta comisiones, que son de las más modestas, aún tienen 44.916 euros por cobrar. Ya se han acabado las mentiras y las excusas de Fuset. Ya no puede culpar a las comisiones, a la falta de personal de su concejalía o a la Intervención General».

A lo que añadió que quedan «sin iniciar ni la tramitación administrativa» otros cuatro conceptos: «bandas de música, iluminación, programa germanos y premios de fallas innovadoras».

Crespo también criticó que la comisión de desarrollo humano rechazara ayer debatir lo que consideran falta de transparencia en el portal de la web de la JCF.