Siete falleras, tres falleros y dos belleas pasaron a engrosar, con sus obras en seda, el particular museo del espolín de la firma Vives y Marí que, siguiendo la costumbre, entregó los certificados correspondientes al pasado ejercicio.

Un conjunto formado por tres falleros, uno de ellos presidente en Gandia; dos falleras mayores de comisión, una "representante mayor", cargo con el que se conoce a quien así desempeña en elcolectivo Fallers Pel Mon, tres falleras mayores de juntas locales (la mayor de Gandia y las dos de Alzira), las dos belleas del foc de Alicante del presente ejercicio y la fallera mayor de València de turno, en este caso la infantil. Caras conocidas en la fiesta que cumplieron de esta manera uno de los rituales de la indumentaria más conocidos.

Vives y Marí lleva años a la vanguardia en el tejido de sedas y prueba de ello es que es el proveedor oficial en gran cantidad de poblaciones, incluyendo las más importantes de la cultura festiva. Este año elaborarán el espolín oficial de la fallera mayor de València, Rocío Gil, y los 26 telas de la corte mayor.