Antonio Ortiz «Ortifus» es dibujante de Levante-EMV y también creador, diseñador y modulador de fallas. Conoce este mundo desde pequeñito y cree que la crítica y la voluptuosidad son cuestiones normales si no ofenden a nadie.
P Ortifus hace fallas y conoce muy bien este mundo, pero ¿visita también otras fallas?
R Yo he nacido en el centro de València y desde bien pequeñito siempre he visto fallas. Pero claro, yo nací en el 48, en una época en la que la censura no dejaba hacer nada. Las fallas eran un espectáculo visual y nada más. Pero cuando empiezo a tener conciencia y tengo la posibilidad de conocer el mundo fallero, es cuando empiezo a utilizar las fallas como una manifestación pública contra algo que quiero quemar. Es el sentido crítico de las fallas. Y aunque yo no soy fallero de casal, las fallas me parecen un espectáculo único en el mundo, porque en un museo tú tienes que ir, pero las fallas están en la calle.
P Precisamente por eso las fallas llegan a más gente y tienen una mayor repercusión si se lanzan mensajes equivocados. ¿Cree que hay un trato denigrante para la mujer?
R Claro que hay casos. Hay un montón de falleros y un montón de fallas, entonces está claro que puede haber casos aislados. Lo que ocurre es que los tiempos van cambiando. Hace unos años es muy posible que Forges dijera «vaca» a una mujer gorda y hoy en día no lo diría. Vamos rebajando la dureza, pero no por eso vamos a eliminar que una mujer sea mujer y que un hombre sea hombre. La belleza no la podemos recortar con base a una moralina social o porque a alguno le moleste. Yo soy calvo y mis dibujos son siempre calvos. Para tener derecho a reírte de los demás, tienes que empezar por reírte de ti mismo.
P Deduzco, por tanto, que no hay que hacer una revisión general de la imagen de la mujer en las fallas.
R Al contrario. Yo creo que hay que incidir en la educación, para que se palpe en el ambiente que una cosa está mal hecha. No puedes herir directamente, no puede ser una ofensa gratuita, porque se puede llegar a lo mismo con sugerencia y con ingenio, sin recurrir a evidencias que cualquier crío pueda ver. Y no estoy hablando del desnudo, porque el desnudo está en la historia del arte y nadie se escandaliza. Una mujer no se puede sentir ofendida por tener pecho, por tener culo. Ahora, somos personas y no podemos ofender gratuitamente.
P ¿Hay algún aspecto de las fallas, fuera de su mundo creativo, en el que se deba evolucionar?
R Yo cree que la educación es básica. Si todos los medios, publicidad, carteles empiezan a respetar a los géneros esto cambiará. Pero la falla es sátira. Se va a quemar, por tanto no debemos alarmarnos si hacemos una cosa para reírnos limpiamente.
