El operativo de seguridad para las Fallas de 2018 quedó finiquitado en la jornada de ayer con las últimas premisas acordadas en la Junta Local de Seguridad.

Además de las restricciones que habrá en MetroValencia para evitar aglomeraciones, uno de los aspectos que se añaden en la normativa es el hecho de que tres comisiones de Russafa tendrán que desplazarse unos metros de su actual emplazamiento, si no hay cambio de última hora en la reunión que deben mantener con Bomberos para tratar de llegar a una solución sobre una decisión que, en estos momentos, es firme.

Para llegar a las luces de Cuba-Literato Azorín hay que pasar por delante de otras tres: Cuba-Denia, Cuba-Buenos Aires y Cuba-Puerto Rico. Las tres han recibido instrucciones de Bomberos de que deben desplazar sus monumentos falleros unos tres metros y medio del centro geométrico del cruce, que es su emplazamiento habitual.

Cuba-Puerto Rico tiene un poco menos de problema porque dispone de un chaflán amplio. Pero para las Dènia y Buenos Aires se puede decir que casi no hay espacio en otro sitio porque sus intersecciones son angostas. Además, la notificación les llegó hace unos días, con las fallas terminadas.

Entre las comisiones afectadas hay desasosiego. Se entiende que las medidas de seguridad son necesarias, pero lo que no se acaba de entender es que haya que tomar unas medidas de casi imposible aplicación a causa de la calle iluminada; es decir, un indudable aliciente turístico, pero que no es, a esos niveles, iluminación típicamente fallera.

Pero que, además, planta una comisión amiga y vecina. Una situación, pues, que van a tratar de reconducir. Aplicando, por ejemplo, la posibilidad de moverlo menos distancia y estableciendo una vigilancia que garantizara que, en caso de tener que pasar un camión de bomberos o que hubiera una avalancha, se pudiera retirar tanto las vallas como las escenas de los monumentos.

Una situación, en cualquier caso, muy complicada porque estas calles reciben la mayor cantidad de visitas de toda la ciudad junto con la plaza del Ayuntamiento. En el Bando de Fallas, la calle Cuba está considerada como «vía libre de obstáculos» cosa que, evidentemente, con tres fallas antes de llegar a las luces. Cuba-Literato Azorín se planta justo en medio de las luces y, mucho más atrás, ajenos a estas cuestiones, se planta Peris y Valero-Cuba. Es la calle de la ciudad que más fallas tiene junto con la de Cirilo Amorós.

La otra vía libre de obstáculos es Sueca, pero que no tiene estos problemas porque no planta ninguna falla hasta el cruce con Literato Azorín, en mitad de la iluminación.

Dos estaciones de Metro cierran

Una de las últimas novedades de la reunión de la Junta Local de Seguridad es que las estaciones de Metro más cercanas a la Plaza del Ayuntamiento quedarán cerradas de 12.30 a 14.30 horas los cuatro últimos días de fiestas, del 16 al 19.

El objetivo es no crear ratoneras, puesto que las bocas de las estaciones de Colón y Xàtiva están muy cerca de las zonas de máxima concentración de asistentes a los disparos. No quiere decir esto que se renuncie al transporte público, sino que la recomendación es apearse una estación antes (según líneas, Bailén, Plaza de España, Ángel Guimerá, Alameda...) y concluir el acceso a pie. Esta medida afectará también, precisamente, a la estación de Alameda dos horas antes de cada castillo de los que se dispararán los días 16, 17 y 18.

Con esta medida se completa un operativo que, en palabras del alcalde Joan Ribó, es el resultado de «un trabajo realizado con mucha antelación. El importante número de visitantes en València durante los días de Fallas y las mismas características de la fiesta, que se vive plenamente en la calle, hace necesario adoptar todas aquellas medidas que sean necesarias para propiciar una convivencia respetuosa durante estos días y la tranquilidad de poder llevar a cabo todos los actos falleros con normalidad. Intentamos ser tan previsores como es posible».

Se podrá acceder a los bares

Hay otra novedad: el domingo fue el ensayo general con la «mascletà» del día de la Crida. La concejala de Protección Ciudadana aseguró que se van a colegiar medidas para que los bares y comercios de las vías de emergencia no se vean imposibilitadas de recibir clientes durante la hora y media anterior al disparo.

«Se va a poder acceder a esos locales». Es decir, podrán habilitarse las aceras «pero no son para ver el la mascletà». Y es que el subdelegado del gobierno, José Vicente Herrera, recordó que «estamos en alerta 4. Entre todos vamos a poner al servicio toda la seguridad posible». A lo que Menguzatto apuntó que «todo viene por lo que sucedió el 18 de agosto» en referencia al atentado de Barcelona y el edil de fiestas, Pere Fuset dijo que «estas medidas no son para aguarnos la fiesta. Es para poder disfrutarlas con toda la seguridad posible».

Otra de las novedades es que la Guardia Civil se incorpora a las charlas que se impartirán en colegios sobre el uso de pirotecnia, que desde hace unos años desarrolla la Policía Local y un refuerzo en las líneas 092 y 112.