Que el empleo de la pirotecnia en Fallas debe limitarse en horarios de alto riesgo es algo que todos consideran necesario. Entre otras cosas, porque a nadie escapa que, por la noche, los pirotécnicos aficionados suelen ser gente con poco autocontrol, y en el que las imprudencias, cuando no el vandalismo, se multiplica. Pero si durante las negociaciones del Bando de Fallas empezaba a vislumbrarse que la banda horaria de la prohibición sería de 12 a 7 de la noche, la concejala de Policía Local, Anaïs Menguzzatto, puso ayer sobre la mesa una contraoferta menos restrictiva.

Dicho de otra forma, recordó que «hace unos meses hicimos la propuesta de prohibir la utilización de petardos de 4 a 8 de la mañana para garantizar así el descanso de los vecinos y consideramos que es algo que tal cual tiene que aparecer en el bando». Un horario que va «desde el final de las verbenas al inicio de la despertà». Está planteada, pues, desde la perspectiva del horario clave para el descanso del ciudadano. «Tenemos que dar una herramienta real y eficaz a la policía local, las generalidades no sirven» aseguró también la edil.

El horario está todavía pendiente de decisión, aunque da la sensación de que el texto, sin embargo, está más cerca de aceptar la banda 12-7, planteado sobre la base de que no perjudica a ninguno de los agentes involucrados en la fiesta. A las comisiones, por ejemplo, porque sus actos pirotécnicos pueden realizarse hasta la una y media de la noche sin problemas y porque, justo lo contrario, el disparo indiscriminado no sólo lo suelen hacer los no falleros, sino que acostumbra a ser causa de conflicto (lanzarlos a los monumentos falleros, en medio de una verbena...). Y que la banda horaria de 4 a 8 es prácticamente la única tregua de la ciudad, con poca actividad y limitado descontrol.

También se plantea que ese horario sea para los días grandes de fiesta, pero más amplio para los días en que, celebrándose actos, no son propiamente «semana de Fallas»; es decir, el fin de semana previo. También se piensa en solicitar que en los puestos de venta se visibilicen los horarios en los que está permitido disparar y en cuales no.

Las horas diurnas y buena parte del anochecer no quedarán sometidos a más norma que la de la utilización adecuada.