El Valencia CF cuenta su edad a partir del 18 de marzo de cada año. Y ese día, en el presente año, marca su centenario. Para quien esté avezado, el aniversario del club de Mestalla coincide con el segundo día de Ofrenda. Y precisamente por ese motivo, una delegación del club de Mestalla ha solicitado por carta oficialmente (tras una reunión previa) a la Junta Central Fallera la posibilidad de participar, con carácter excepcional, en el desfile de dicha fecha dentro de poco más de dos meses. Se trataría de uno de los actos que marcarían la jornada conmemorativa.

La propuesta debe ser aprobada por la asamblea de presidentes y tiene un carácter absolutamente inédito si exceptuamos el hecho de que hay otras entidades no falleras que, año tras año, también son invitadas, como las Casas Regionales o Lo Rat Penat, pero que tienen claras vinculaciones con las fallas.

En este caso se trataría de una Ofrenda de unas cien personas y, aunque no se han dado datos de los participantes, se entiende que incluiría jugadores, ex jugadores, directivos, ex directivos y empleados. Dependerá, lógicamente, del calendario de la plantilla fundamentalmente, aunque todo parece indicar que los jugadores que lo deseen podrían desfilar porque esa semana no hay competición. Además, ese día estarán invitados al palco municipal para presencia la «mascletà». La comitiva saldría por la calle San Vicente, y, eso sí, lo haría entre las tres y tres y cuarto de la tarde, para no retrasar a la comitiva oficial, que iniciarán Benicalap y Campanar.

Por lo que respecta a la indumentaria, la lógica dice que lo harían de particular o de valencianos a elección. La ropa de paisano es la «de gala» que tienen como entidad y el supuesto sería similar si se aplicara el ejemplo de Lo Rat Penat, en el que hay trajes tradicionales y de paisano.

Homenaje y recompensa

En el pleno de la JCF en el que se trató este tema se guardó un minuto de silencio por los miembros recientemente fallecidos, Arturo Berenguer y Antonio Villalba y precisamente a éste se le concedió a título póstumo el «bunyol de brillants».