La comisión de Pío XI-Fontanares ha presentado la duodécima edición de su Entrada Mora y Cristiana, que pasa por ser uno de los grandes eventos que tienen lugar en el "sábado prefallas". Con la experiencia acumulada y con la reciente incorporación y auspicio de la Federación Valenciana de Moros y Cristianos, se ha consolidado un festejo que supone una atracción de primer orden en un barrio residencial. Miles de personas acuden como público a presenciar el desfile de comparsas.

El acto contó con la presencia de los capitanes moro y cristiano, Jaime Chacón y Valentín García-Casarrubios y se presentó a las huríes, que ya se ha institucionalizado que son la fallera mayor de València y la corte de honor del año anterior. En este caso, Rocío Gil y sus doce falleras, que recibieron las primeras nociones de paso. Este cargo lo repetirán posteriormente, como suele ser tradicional, en la Parada Mora de Almirante Cadarso el 19 de marzo.

Participarán 25 escuadras con ballets, carrozas y bandas de música. Como prueba del crecimiento del desfile, este año se instalarán por primera vez localidades numeradas. Habrá, además, un espectáculo especial previo y, como el año pasado, la actuación de la Orquesta Montecarlo como fin de fiesta.

El desfile empezará a las 19 horas.

No será el único desfile que habrá en la ciudad, puesto que en la Gran Vía se desarrollarán otros dos y, curiosamente, en calles separadas por esa avenida. Son las que auspiciarán las comisiones de Conde Salvatierra-Cirilo Amorós y Jacinto Benavente-Reina Doña Germana por otro.