La comisión de Pere María Orts es la primera que ha desvelado el proyecto de la falla grande que plantará en el año 2020. Estará inspirada en el mundo del cine y es original de Manuel A. Guitarte.

Con este proyecto empieza el largo camino que llevará, a lo largo de los próximos meses, a ir desvelando las obras que se plantarán y quemarán el próximo mes de marzo. Ahora es la "temporada baja", aunque hay comisiones que, a estas alturas, no sólo tienen contratado el artista, sino también el proyecto. Aunque la presentaciòn de los mismos -acto que seha convertido ya en litúrgico en el calendario anual- se irá goteando en el tiempo, acentuándose a partir de septiembre. Después de Pere María Orts, la siguiente ha sido Av. Plata-La Senyera.

Pere María Orts plantará con ésta su falla número 43. Tras muchos años de atonía, con escasos premios, a primeros de década tuvo atravesó su mejor momento, llegando a rozar la victoria en 2015 en la última categoría con un segundo premio de Vicente Sancho Fort. Manolo Guitarte, todo un veterano en las lides falleras, ya plantó el año pasado para estos falleros.

La comisión de Plaza de Pere María Orts tiene una notable peculiaridad en tanto buena parte de su demarcación es un pequeño enclave del término municpial de València, pero separado del resto de la ciudad por la avenida del Cid, por lo que pertenece al sector y la agrupación de Mislata. Durante el pasado ejercicio ha terminado además de adaptar su nueva denominación, puesto que desde su fundación fue la "Falla Eduardo Marquina", nombre cambiado por la aplicación de la Ley para la Memoria Histórica.

Precisamente, la comisión ha mantenido el escudo fundacional, cambiando el nombre en la estela interior. En el emblema había un libro abierto y una pluma, elementos que se mantienen (sirve indistintamente para Eduardo Marquina como para Pere María Orts) pero lo que han hecho es escribir en las páginas abiertas la leyenda "Fundada como Falla E. Marquina 1977-78 2017-18". No en vano, casi medio siglo de persistencia no sólo ha institucionalizado el nombre (que con el paso del tiempo se va borrando de la memoria), sino, y esto es más complicado de borrar, el apodo. Los "marquineros".