Los artistas que plantarán en la sección Primera B han decidido sumarse al debate sobre la reducción de tamaños de las fallas para, según consideran, contribuir a hacer viable la profesión. Y por eso han anunciado la convocatoria del primer paso, que pasa por reunirse con las comisiones. En concreto, para «exponerles nuestras inquietudes y problemas y aportar soluciones de volumetría, al igual que ha sucedido en los acuerdos de las secciones de Especial y Primera A. Medidas destinadas a regular el concurso para tener todos una igualdad de oportunidades a la hora de trabajar y concursar de ahora en adelante, todo ello en beneficio de la sostenibilidad de los talleres y del oficio de artista fallero y proteger lo que mas queremos: la Fiesta de las Fallas y el Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad que representan».

Este paso era el previsto después que los dieran los artistas de la Especial y Primera A. En ambos casos se ha llegado al acuerdo de reducir ese volumen, limitando la altura a 14 metros en Especial y a 12 en Primera A. En el caso de Primera B no está confirmado pero oscilaría en las escalas inmediatamente inferiores: 11 o 10 metros.

Estas categorías son las básicas para desarrollar el «efecto dominó» que, a partir de ahí, desarrollaría las limitaciones mediante tramos, hasta alcanzar un «máximo mínimo»; es decir, el que afectaría a los últimos segmentos de secciones (sextas, séptimas, octavas...) que estaría entre sobre los 5 o 6 metros, estas sí, teóricamente, con acuerdo asambleario de presidentes.

Sección casi «a la carta»

Este acuerdo entre artistas es factible porque Primera B sigue siendo una sección casi «a la carta» y se puede delimitar quienes son los artistas. De hecho, la convocatoria la hacen, con nombre y apellidos, Pere Baenas, Salva Bañuls & Néstor Ruiz, Josué Beitia, José Ramón Devis, Luis Espinosa, Vicente Llácer Rodrigo, Francisco Vizcaíno, Pau Soler, Luis Enguídanos, Arturo Vallés y las firmas Sacabutxart SL y Santaeulalia Tematización SL.