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La falta de uso de las carpas durante 5 días lleva a atrasar su "plantà" en las Fallas 2020

Los programas de festejos de años anteriores demuestran que, entre semana, las comisiones apenas utilizan la carpa para hacer actividades

La falta de uso de las carpas durante 5 días lleva a atrasar su "plantà" en las Fallas 2020

Las disposiciones del Bando de Fallas para 2020 estaban llamados a no satisfacer plenamente los deseos de ninguna de las partes en juego: ni de los falleros, por un lado, ni de vecinos y comerciantes por otro, que intentan antagónicamente maximizar y minimizar el espacio público y el impacto en la calle de las actividades que rodean a la falla propiamente dicha. Por eso, ninguna de las partes salió completamente feliz en un año, 2020, con la peor combinación posible de fechas, verdadera clave del asunto.

La molla del acuerdo es que la fiesta podrá seguir disfrutando del «Prefallas», pero con notables problemas logísticos. Una jornada que no es, precisamente, una «tradición», sino un producto del propio crecimiento de la fiesta, autorizado y asumido por costumbre. El sábado previo a Fallas, entendidas no como el día 19, sino el 15 o 16, las calles ya se ocupan con actividades.

Esta jornada está, habitualmente, acompañada de la inauguración de las carpas. Que tampoco son una tradición, sino un producto del propio crecimiento de la fiesta.

Las comisiones podrán mantener verbena y actividades, pero sin el apoyo de las carpas. Por contra, los comercios, la distribución o los residentes tendrán que «soportar» unas jornadas de fiesta en la calle fuera de calendario, pero evitarán las molestias que habrían supuesto, durante cinco días (cuatro completos y dos medias jornadas), unas carpas infrautilizadas, cuando no cerradas a cal y canto. Lo mismo que en 2015, cuando sí que se autorizaron y empezaron a aparecer en calles y plazas nada menos que el 4 de marzo.

¿Cuál es el problema para las comisiones? Que el calendario ya habitual indica que en «prefallas», la carpa acoge actos consolidados, especialmente la cena de falleros de honor (muchas de ellas previstas para el viernes 6), un acto que antaño se celebraba en el propio casal o en restaurantes y salones. Ahora, sin carpa, tendrá que trasladarse a otro espacio o fecha, que podría ser el viernes 13 ?si es que ese día no hay otro evento previsto, como la «cena de la fallera mayor»?. O cancelarse, con el perjuicio económico que supone.

El sábado 7 y domingo 8, además de las verbenas (que teóricamente son al aire libre) se complementan con otros actos que se verán perjudicados. Simplemente releyendo los programas de festejos de las comisiones del pasado año encontramos «sopars de confraternitat», lectura del llibret, cena de la fallera mayor, quinto y tapa, merienda de disfraces... aparte de actividad gastronómica (paellas, «torraes» que, por lógica, se consumen en la amplia carpa). Es decir, una actividad potente, para la que habrá que echar mano del casal. Independientemente de que se hace constar que algunas de las verbenas son en el interior de la carpa.

Pero a partir de la tarde del domingo 8 es cuando la actividad se habría esfumado. Lejos de aprovecharse como contenedor cultural, se convierten en espacios que habrían estado ayunos de actividad hasta la tarde del viernes 13, con la llegada de los niños al empezar las vacaciones. Esto supone prácticamente esas dos medias jornadas de domingo y viernes y cuatro días completos, de lunes a jueves.

Cenas de sobaquillo, juegos...

Porque ahí, los programas de festejos de las comisiones también son tozudos testigos de la realidad. El pasado año, las fechas del lunes 11, martes 12 y miércoles 13 son un verdadero erial, sin actos programados.

Tan sólo ocasionalmente la carpa se convierte en espacio opcional para cenas de sobaquillo, finalización de campeonatos de juegos de mesa. E igual de ocasionalmente aparecen "cucanyes per als nostres infantils". Actos menores, que pueden celebrarse en el casal. En campaña electoral, todos los partidos entendían que mantener las carpas durante casi cinco días sin utilizar requería una reflexión de cara a 2020. El PP dejó caer una propuesta, consistente en autorizarlas en el caso de que demostraran que se celebraban durante esa semana unas actividades que justificaran su presencia, especialmente para el público infantil (charlas sobre seguridad en la pirotecnia, historia de las Fallas...). La decisión final ya está tomada.

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