La retirada del artista fallero Vicente Almela al cumplir la edad de jubilación va a traer consigo una notable originalidad en las Fallas de 2020, puesto que una de las dos fallas que plantará, la de Bolsería-Tros Alt, tendrá un hilo argumental que retoma otra falla plantada hace 43 años.

Almela plantó su primera falla infantil en 1976 en esa demarcación. En "Tradicions", una anciana narraba a sus hijos historias del barrio y de la ciudad.

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El próximo mes de marzo reaparece una de esas niñas, convertida en convertida ya en una mujer madura, contando a sus hijos, también un niño y una niña, las mismas historias, pero en clave de modernidad, a sus hijos, sosteniendo, además, una foto de aquella falla primigenia. Dos fallas con casi medio siglo de diferencia para seguir contando una misma historia. La falla de marzo tiene como lema, precisamente, "Aquella xiqueta del 76"

Las "fallas dobles" es un recurso poco habitual en la fiesta, pero se ha dado en alguna ocasión. Consiste en darle una coherencia temática a dos fallas. Se ha dado, por ejemplo, con fallas que se plantan en años consecutivos. Por ejemplo, Cuba-Denia llegó a plantar cinco fallas seguidas bajo el lema "Faltan cinco años", "Faltan cuatro años..." en alusión a su centenario.

Otras fallas han sido "dobles" al tener una coherencia interna la falla grande y la infantil, bien por el argumento, bien llegando a ser la infantil una escena de la grande. El propio Vicente Almela aplicó esta fórmula en 2016 en Séneca-Yecla, combinando su falla grande con la infantil en colaboración con los hermanos Tomillo.

Otra originalidad muy grande fue la de 2004. El artista Francisco Vázquez plantó, separadas por unos centenares de metros, "Lo que ha de ser una falla" y "Lo que no ha de ser una falla", en las demarcaciones de San Ignacio de Loyola-Jesús y María y En Plom-Guillem de Castro. En esta ocasión, la originalidad es esa coherencia temática casi medio siglo después.

La falla infantil de Bolsería en 1976 y el proyecto para 2020

Almela plantará otra falla más, la de Sant Antoni de Xirivella, el próximo mes de marzo y aún aguantará laboralmente hasta junio para concluir el curso del Ciclo Formativo, del que es profesor.

A lo largo de su carrera, Almela ha completado una notable carrera artística, en la que una de las principales características, más allá de los premios, es el haber conseguido una línea estética propia, que identifica sus trabajos. Es uno de los artistas mejor considerados en la historia moderna de las fallas.