«El patrón de flores es favorito de la moda en este otoño. Lo celebramos en València, entre las flores folclóricas de la fiesta de las Fallas».

Florido. Es el lema del reportaje que, cinco meses después de realizarse, ha visto la luz en la revista Harper's Bazaar en su versión holandesa y en el que la indumentaria tradicional valenciana sirve de telón de fondo para la exhibición de prendas y complementos de las más altas firmas internacionales en la temporada de otoño. Es el resultado del reportaje que contó, para su realización, con la colaboración, de unas modelos muy especiales: la fallera mayor del pasado ejercicio, Marina Civera, y su corte de honor, que se convirtieron en este caso en las portadoras de uno de esos elementos distintivos de la fiesta: su indumentaria.

El reportaje completa una serie de dos realizados por la revista neerlandesa, que en su edición anterior, habían aprovechado el desplazamiento para hacer otro reportaje destinado a la ciudad. Bajo el título «Viva València», el encabezamiento era una fotografía a doble página de las falleras, y en el mismo se destacaba que «Valencia puede estar en la cima de su lista de deseos de vacaciones» señalando que «lo tiene todo: sol, mar, cultura, arquitectura deslumbrante, un centro vibrante y excelentes restaurantes».

Prada, Armani, Gucci, Chanel...

En la siguiente publicación, la modelo Valentine Bouquet interactuaba con Marina y siete de las falleras de su corte ?fue una actividad no oficial, optativa, que se desarrolló en un día laborable y por la mañana?. En el mismo se aprovechaba la espectacularidad de la indumentaria para jugar con el contraste de los modelos de alta costura. Tanto, que a pesar de que las imágenes fueron tomadas en el centro histórico, éste pasa completamente desapercibido. El interés radica en el diálogo entre prendas. El de las telas de Vives y Marí y los complementos con las ideas surgidas de Prada, Longchamp, Armani, Gucci o Chanel, entre otros.

Un señuelo del reportaje fue publicado en las redes sociales y, como suele ser habitual, llamó la atención poderosamente: el vídeo de Instagram es uno de los que tienen más visionados en su historial, sólo superado de los recientes por un homenaje a Karl Lagerfield. Precisamente en el vídeo es donde existe el único pero expresado a los responsables de la revista: que la música de fondo es flamenca. El reportaje hace referencia a «València, España», y se recurre al tópico; seguramente de la misma manera que aquí Holanda evoca gorros almidonados, zuecos y tulipanes, sin más disquisición regional.

En cualquiera de los casos, se trata de una promoción gratuita de la ciudad (fue realizado con el apoyo de la Fundación Turismo València) y su patrimonio ?aparte del esfuerzo de tiempo y económico de Marina y sus falleras, que se vistieron y peinaron ex profeso? pero que volvió a poner en evidencia que esta parte de la fiesta es capaz de captar la atención en los espacios más internacionales. Así lo admitió en aquel momento el creativo, Piet Paris: «Descubrí la indumentaria valenciana y me pareció muy interesante. Amo la belleza y esto lo es. Y esa combinación es espectacular».