Las relaciones entre la Interagrupación de Fallas y el gobierno de la ciudad vivieron ayer un particular deshielo con la primera reunión mantenida por el ente fallero con el alcalde, Joan Ribó. Una reunión que puso en evidencia que la entente entre ambos es mucho mejor que en la pasada legislatura, con el anterior equipo, pero que ahora se basará, obviamente, en que las buenas intenciones se conviertan en hechos.

Joan Ribó fue el primero que reconoció al colectivo que en las fiestas de 2020 se hace un esfuerzo importante al tener que aceptar que las carpas no se planten en el fin de semana previo a fiestas (porque habrían provocado que estuvieran en la calle, sin prácticamente uso, durante cinco días). Pero la Inter, por contra, sí que reclamó que, cuando empiecen a formalizarse los permisos y a plantarse las fallas y las carpas, no haya «sorpresas» por parte de otras delegaciones -fundamentalmente, Movilidad y Policía Local-.

También se pretende que haya un gesto por parte del gobierno municipal a la hora de reconocer a los falleros como autores de la fiesta y, sobre todo, para liquidar los estereotipos, tantas veces falsos, de que el fallero está detrás de las imágenes de suciedad e insolidaridad en la ciudad. Obtuvieron la promesa de que habrá una campaña de concienciación en ese sentido.

De la misma manera que se va a estudiar que el ayuntamiento ayude a las comisiones con la nueva normativa que prohibe los vasos de plástico de usar y tirar. De tal modo que el consistorio gestionará surtir a cada comisión con un vaso de múltiples usos por cada fallero.

También se habló de la necesidad de poner en marcha nuevamente el estudio sobre el Impacto Económico de la fiesta, que quedó parado en la anterior legislatura cuando se empezó a pedir a las comisiones que hicieran una estimación de su movimiento económico.

Las carpas, espaciadas

La Interagrupación está a la espera, por otra parte, de que se concrete el calendario de instalación de carpas para poder espaciarlas más. Dicho de otra forma, que en las jornadas de 11 y 12 de marzo puedan repartirse 90 y 90 carpas, para llegar al viernes 13 con todas ellas preparadas y que ninguna comisión pueda correr el riesgo, como pasó el año pasado, de no tenerla en tiempo y forma.