Los carteles de fallas en los últimos años generan opinión. Tan furibunda a favor como en contra, según sople el viento. Antes quedaban enmohecidos en el cajón y pasaban, injustamente, por el filtro de la indiferencia. Ahora, entre los que elogian el diseño, la vanguardia y la oportunidad y los que consideran que no representa a la fiesta o que, simplemente, no valen nada, la obra anunciadora de la fiesta da cuartelillo durante unos días. A favor de quienes la defienden hay un factor incontestable: los diseños de los años anteriores han obtenido premios internacionales a tutiplén. Para los contrarios, que lo ven alejado de la realidad de su fiesta.

El caso es que Didac Ballester plantea con su propuesta dos elementos que resaltan en la fiesta: el día y la noche, representados con la «mascletà» y la «cremà», «que incluyen dos elementos que, la serie de carteles históricos, se han repetido continuamente: el fuego y la pirotecnia».

La metáfora es el humo blanco del centro, que quiere indicar que, detrás, hay un montón de aspectos de una fiesta llena de matices, que hay que venir a descubrir.

Siguiendo la costumbre de los últimos años, no se trata tan sólo de un cartel, sino de una campaña gráfica completa, que tendrá elementos y aplicaciones para diferentes eventos y aspectos de la fiesta, que incluirán la exaltación de las falleras mayores, la Exposición del Ninot (donde habrá un photocall en tres dimensiones para poder interactuar) o el calendario pirotécnico, que son algunas de las próximas citas. Estos carteles se marchan rápidamente a Fitur para que tengan allí su primera aparición pública y, desde ya, se les verá también en mupis tanto de la ciudad de València como en otras de España y europeas.

El concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, destacó «la solvencia» del diseñador y «el trabajo que nos permitirá un año más demostrar el gran valor que tiene la cartelería festiva y más en València, donde ha sido un elemento esencial en la candidatura que ha conducido a València hacia la Capitalidad Mundial del Diseño en 2022. Si lo somos, la Cultura Festiva tiene mucho que ver». Ante el examen y opinión de la obra recordó «la garantía de calidad que supone haber contado con el visto bueno de los profesionales del diseño».