El Ayuntamiento de València ha iniciado 9 procedimientos sancionadores a otras tantas verbenas de las realizadas el pasado sábado 7 de marzo en la ciudad, por incumplir la ordenanza de limpieza y de residuos, y por no haber respetado el bando fallero.

Las entidades organizadoras de estos eventos, las comisiones falleras, tienen ahora un plazo para presentar sus alegaciones y se analizará caso a caso cada expediente con el objeto de fijar las sanciones correspondientes.

Esta información se dio a conocer en la mañana de ayer a Levante-EMV, antes de que el president Ximo Puig anunciase el retraso de las Fallas 2020 tras horas de deliberaciones con los técnicos del Ministerio de Sanidad y por la crisis social y sanitaria del coronavirus.

En total, durante el supersábado fallero se realizaron 42 inspecciones a verbenas con el resultado de 9 de ellas sancionadas con actas por infracciones relacionadas con la falta de la limpieza diaria viaria, así como con la adecuación de las zonas de fuegos, cuidando que se depositen los residuos bien apagados en bolsas cerradas y en los contenedores correspondientes.

Un total de 4 inspectores especialistas en limpieza y recogida de residuos desplegados el fin de semana velaron para que antes de las 8 de la mañana, en la zona del Mercado Central, y a las 7, en el entorno del Mercado Russafa estuvieran todas las calles limpias y como si no hubiese habido verbena unas horas antes. Además, en los controles efectuados en los barrios valencianos se ha tomado nota especialmente del cumplimiento por parte de las fallas organizadoras de las obligaciones incluidas en el Bando Fallero.

Tal como determina la ordenanza municipal, quienes incumplan esta norma se enfrentan a sanciones leves, graves y muy graves con cantidades que van de 750 a 1.000 y 3.000 euros.

En particular, según las fuentes consultadas, este fin de semanapasado se controló el desbordamiento de contenedores y papeleras, el uso de los contenedores metálicos y de los urinarios instalados en la vía pública junto a los posibles daños acaecidos en el mobiliario urbano.

Por ende, se supervisó que se lleven a cabo los servicios de limpieza privados como los relativos a las comisiones, en mascletades y verbenas, los restos de montajes y carpas, los residuos generados en el entorno de churrerías y puestos de venta, y en terrazas de bares y cafeterías.

Más sanciones en la zona norte

De las 42 inspecciones efectuadas en la capital valenciana, 23 se efectuaron en la zona 1, la situada al sur del Túria. En la zona 2, al norte del río,se efectuaron 15 visitas; y en la zona 3, se concretaron 4 inspecciones en la denominada fachada urbana marítima y Quatre Carreres.

En cuanto a las 9 infracciones, 6 se localizan en la zona 2; 2 en la 1; y 1 en la 3. Una vez se abre el procedimiento sancionador a las entidades infractoras, se trasladan los expedientes a los servicios centrales municipales de liquidación para que se encarguen del cobro de las sanciones en metálico que se impongan.

Estas visitas de control y las sanciones impuestas forman parte del plan de inspección especial, a cargo de profesionales especializados, que había diseñado el vicealcalde Sergi Campillo y su equipo antes de conocerse el anuncio de Ximo Puig.

En concreto, como explicó hace unos días el vicealcalde Sergi Campillo, estos inspectores -además de las empresas y las contratas municipales- se iban a asegurar de que las fallas colaborarán en la limpieza de las verbenas y en otros actos como el montaje de las carpas, la plantà y la cremà, el ocio nocturno y el desmontaje de carpas.