Alejandro Santaeulalia, con su proyecto «Protegeix allò que estimes», será el artista que plantará el año que viene la falla municipal en la Plaza del Ayuntamiento. Así lo decidió ayer el jurado elegido para la ocasión, que ha destacado las cualidades del proyecto. Se ve frustrada así la posibilidad de que en 2021 plantaran los artistas que este año no han podido hacerlo por la crisis del coronavirus, José Ramón Espuig y Manolo Martín, que también se habían presentado al concurso junto con Pablo Ovejero y Manolo García. Y queda descartada la icónica imagen de la «meditadora», rescatada de la falla de este año antes de quemarla a puerta cerrada.

En esta ocasión, el veterano y reconocido artista Alejandro Santaeulalia comparece al concurso junto con el artista urbano Dulk. Ambos han sido felicitados ya públicamente por el Ayuntamiento de València.

El concejal Carlos Galiana, cuestionado desde la oposición municipal por haber reducido la representación fallera en el jurado y «estar más preocupado de borrar la huella de su antecesor en el cargo» y compañero de partido Pere Fuset, destacó «la calidad de todas las propuestas presentadas, que nos han permitido visualizar cuatro grandes fallas dignas de ser la falla grande municipal de 2021». Así mismo, valoró positivamente el desarrollo del proceso, con ocho candidaturas (cuatro grandes y cuatro pequeñas) que los artistas falleros «han defendido con mucha pasión y cargados de argumentos artísticos incuestionables».

El proceso contempla un presupuesto de 205.000 euros para esta falla y establece la apuesta por los materiales sostenibles y la singularidad y la sátira entre los criterios valorables por los jurados.

El comité seleccionador lo han integrado cinco personas propuestas por varias entidades falleras, del mundo de las artes y de la sociedad del Cap i Casal: Teresa Chafer, del departamento de Escultura de la UPV, a propuesta del Gremio de Artistas Falleros; el diseñador Vicente Gallega, en representación de la asociación València Capital del Diseño 2022; el fallero Rafael Hércules, por designación de la Interagrupació de Fallas; José Montesinos, jefe de estudios y representante de la Escuela Superior de Arte Dramático, e Isabel López a propuesta de la Junta del Colegio de Publicitarios de la Comunitat Valenciana, del que es miembro.

«Es una falla que me ha hecho volver a mis años de niño», destacó Montesinos, mientras que «la composición, el juego visual y el lenguaje plástico y que rompe con todo aquello que hemos visto en los últimos años» ha sido lo que ha puesto en valor el proyecto seleccionado para Hércules. Para López, la falla del año que viene «será un guiño perfecto a la Capital del Diseño» y para Gallega tendrá «una fantasía y una policromía» dignas de resaltar. Por su parte, Chafer ha asegurado que «este proyecto ha llevado la tradición al diseño de vanguardia».

Un icono de la fiesta

Alejandro Santaeulalia (1971) se formó en el taller de su padre, el también artista fallero Miguel Santaeulalia, y creó su propio taller en 2000 para dedicarse, fundamentalmente, a la elaboración de fallas, hogueras, escultura pública y tematización de espacios. En 2004 incorporó tecnologías de ingeniería inversa (digitalizado 3D, maquetado digital y mecanizados CAD/CAMROB). El diseño de proyectos, tanto para trabajos propios como para otros artistas, es una de sus especialidades más reconocidas. En 2001 se estrenó en la sección Especial con la falla de l'Antiga de Campanar y un año después, en colaboración con el taller de su hermano Pedro Santaeulalia, se hizo con el primer premio de la sección Especial. En 2003 plantó su primera falla en la Plaza del Ayuntamiento (junto con Agustín Villanueva y Jorge Ballester), donde repetiría en 2005 como responsable de la falla, en 2006 (en colaboración con el taller de Ramón Espinosa), en 2007 (colaborando con el taller de Pere Baenas), en 2009 y en 2010 (con su hermano Pedro Santaeulalia), en 2012 junto con Vicente Llácer y también en 2013.