"Hubo un momento en que la vida nos encerró en casa y temí que iba a durar mucho más de lo que imaginábamos. Cuando me levanté al día siguiente escribí un capítulo uno". Era el 14 de marzo, el día después en que la humanidad se paró. Ese día, a las diez menos ocho minutos de la mañana, Jaime Bronchud, director del programa "Tot es Festa" de LevanteTV escribió "Estado de Alarma", ilustrado con una foto filtrada de una "plantà" de Cádiz-Cura Femenía, comisión que preside.

A partir de ese día, y hasta el 21 de junio, no hizo madrugar, pero sí que hizo esperar a la media mañana de las redes sociales para esperar una nueva dosis de prosa lírica, su Diario de una Catarsis, que, ahora, se convierte en libro con los primeros 50 capítulos. Dedicados a hablar de uno mismo, pero, tal como reconocía el autor, se convertía en un reflejo de todas aquellas personas que, también confinadas, vivían sus mismas sensaciones personales.

El diario responde a una liberación personal, a la voluntad propia de emprender una vida nueva después de una crisis personal enorme y que queda mitigada, borrada y rehabilitada a base de capítulos escritos primero desde el confinamiento y después con más libertad. "Mi sorpresa que fue la misma soledad que yo tenía en mi casa la tenían otros y que, a traves de Facebook, se abría una ventana". Una lírica que Ángeles Hernández calificó casi de "mucho más que un diario o una novela. Es pornografía emocional, una forma en la que Jaime abre todo su interior". Un desnudo con mucho de liberación. No es un relato fallero, aunque sean muchas las referencias a la fiesta. No es un diario de lo que pasa fuera de las cuatro paredes. Es, sobre todo, una puesta en paz con uno mismo, en el que los paralelismos con el lector aparecen en cualquier recodo del papel.