La nueva directiva de la Junta Central Fallera promete cariño y visibilidad a los indumentaristas de cara al próximo año. Intangibles que llevan reclamando y que, de momento, sustituye a una petición ancestral dentro de los proveedores de la indumentaria tradicional: que todos ellos cobren. Que surtir de complementos (enaguas, peinetas, zapatos, posticería, medias...) no sea exclusivamente a cambio de la publicidad que supone el latiguillo "Indumentarista Oficial de la Junta Central Fallera". Pero, de momento, se les ha prometido que habrá atenciones con las empresas, las cuales por otra parte, quedan renovadas automáticamente para el año 2021. De hecho, no se tratará de un cambio de los elementos, sino un arreglo o reposición de aquellos que, por desgaste, sean necesarios. La reunión se saldó con buenas "vibraciones". Igual de ancestral es la queja de estas pymes en el sentido de no sentirse respaldadas a pesar de su contribución a una parte de la gestión de la Junta Central Fallera que les ahorra una buena cantidad de dinero a los presupuestos del organismo municipal.

Hay que recordar que la Junta Central Fallera sí que ha sacado a licitación un traje nuevo para las 26 falleras, con el que afrontar también el segundo año de reinado. En concreto, las telas, las manteletas y la confección. A pesar de que los dos oficiales que recibieron para 2020 han recibido menos castigo que en condiciones normales, se pretende con esto evitar que acaben extremadamente deteriorados y, de alguna forma, dinamizar el mercado. No hay que olvidar, en todo caso, que la Junta Central Fallera tiene una asignación económica que debe emplear, so pena de ser transferida a otra concejalía. De hecho, los precios de licitación son superiores al de los últimos años.

Habrá un acto de presentación oficial de la indumentaria 2021, lo que supondrá también una nueva cuota de pantalla para todos ellos, a imagen y semejanza del que se realiza todos los años (el pasado ejercicio, en el Ateneo) y los profesionales pidieron otro intangible no menos importante: que las falleras se vistan. Que acudan a actos y visibilicen la indumentaria como una forma de recordar que la fiesta no puede pararse y que cuento más se vea la indumentaria, más se estimulará el mercado.