A María José Lora, presidenta de Piroval, se le quebró la voz cuando, durante la lectura del manifiesto hablaba de la «desatención de la administración, que supondrá de forma inevitable la desaparición del sector pirotécnico, actividad tradicional valenciana que arrastrará la pérdida de tradiciones centenarias como la mascletà, la despertà, la cordà.... y supondrá el fin de un sector artesano autóctono, porque nuestros artesanos están buscando trabajo en otros lugares y no volverán».

Fue el momento más emotivo de la concentración pirotécnica. Un éxito de convocatoria porque estaban todos los que tenían que estar. De Ricardo Caballer a Reyes Martí, José Peñarroja, José Manuel Crespo de Valenciana, Gaspar Guaita de Turís, Europla al completo, Zarzoso, todas las denominaciones con apellido Caballer... imposible hacer distingos. Todos con una misma idea: sentirse desamparados. «Nuestra situación es límite, pero lo que queremos es que se vuelva a escuchar en la plaza ese "senyor pirotécnic pot començar la mascletà"». Pero, para eso necesitan dos tipo de activaciones. Por una parte, algún tipo de alivio para los gastos fijos, que son los mismos que en plena actividad (seguros, vigilancia, sensores, inspecciones, limpieza...) y por otra, disparar. «Porque no provoca contagios, tal como se ha demostrado en algunas acciones. Es viable celebrar espectáculos en determinadas condiciones, tal como ocurrió con el programa "Torna la Llum"». Por eso «hacemos un llamamiento a los ayuntamientos para que hagan fuegos artificiales, aunque sea en diferentes ubicaciones, en las fiestas patronales del verano».

Se sienten desamparados por la administración. «Ni escuchan nuestros problemas ni se organizan mesas de trabajo para sentar las bases de la nueva pirotecnia». De hecho, tan sólo señalaban «reuniones con el ayuntamiento, pero simbólicas y carentes de contenido. La Generalitat ni contesta». Y advierten: «A la vuelta de pocos meses , el sector habrá quedado destruido». Y que «en caso de desaparición correría riesgo la acreditación de las Fallas como patrimonio Inmaterial de la Humanidad, y la administración tiene la obligación de conservarlo y protegerlo». Una traca puso el remate a una protesta que visibilizaba el colapso de uno de los sectores más perjudicados por la pandemia.

Una campaña de micromecenazgo, coordinada por todos los sectores afectados, se pondrá en marcha para intentar paliar el drama, aunque las soluciones que se necesitan son de mayor calado.

Queda en el aire qué pasará con el castillo simultáneo del 18 o 19 de marzo. El PP se mostró, en palabras de María José Català, totalmente de acuerdo -la concentración sirvió a los partidos de la oposición municipal para criticar lo que consideran «abandono» del sector, reclamando «un gesto» por parte de la administración local-. Galiana no se hizo foto con los pirotécnicos, pero reivindicó lo que considera como la única gestión que se ha hecho con estos profesionales. «Nosotros sí que materializamos los contratos de 2020 y hemos prometido repetirlos en 2021». Y del disparo para recordar las «no fallas» aseguró que «está entregado el proyecto. Que no depende de nosotros porque se dispara después del toque de queda y no nos corresponde», en alusión a Generalitat y Delegación de Gobierno.