Cristina García y Clara Tortosa, falleras mayores de Gandia, han completado uno de los primeros rituales de su reinado: trasladarse a la sedería Vives y Marí para elegir los colores del tejido que llevarán en sus trajes oficiales. Siguiendo la costumbre de tantas representantes de las fallas en diferentes poblaciones, que tienen como proveedor oficial a la firma de Xirivella, ambas acudieron a su sede para elegir los fondos de la indumentaria, que empezará a confeccionarse inmediatamente. Allí fueron recibidas por Juanvi Aznar y Amparo Sanchez y salieron con la decisión ya tomada para que los telares empiecen a trabajar.
Las de Gandia son dos falleras mayores históricas, puesto que, por primera vez, la representación de las fallas de una gran ciudad es ostentada por madre e hija.
Con este ritual se reanuda la relación de Vives y Marí con la Junta Local Fallera de Gandia, donde llevan varios años tejiendo un diseño especial para los trajes oficiales que se llaman, precisamente, "Fallera Mayor de Gandia" y "Fallera Mayor Infantil de Gandia", que después se convertirán en traje de valenciana por las manos del indumentarista Juan Martí. A lo que hay que añadir aquellos trajes que las representantes confían para el resto de su fondo de armario. En la última entrega de certificados de espolín de Vives y Marí (en enero de 2020, un acto que pudo celebrarse antes del parón por la pandemia) estuvo presente la fallera mayor de Gandia de 2019, Laura Puig, para quien se había tejido un "Noelia" de color aguamarina para su Crida.
Recientemente, y dentro del proceso de recuperación de los rituales de la indumentaria, la empresa de Xirivella también ha entregado las telas a falleras mayores y cortes de honor de Torrent.
Ahora, Vives y Marí tienen pendiente recuperar, en los proximos meses, un acto tan especial como el de la entrega de los certificados del doble ejercicio 20-21, que incluirá el "Fallera Mayor de València", en color Rosa Oporto, tejido para Consuelo Llobell.
REVIVE LA ENTREGA DE CERTIFICADOS DE ESPOLÍN DE 2019
