Una propuesta alternativa presentada por el equipo de gobierno a las presentadas por la oposición -la fórmula habitual dentro de la particular guerra de paternidades de las propuestas en los plenos municipales- permitirá a las Fallas disponer de una aportación económica suplementaria. Sin cuantificar, pero comprometida.
De hecho, el acuerdo compromete al equipo de gobierno a "trabajar con el colectivo fallero y sus representantes y materializar ayudas directas a las comisiones y disminuir de esta forma los importantes efectos negativos causados por la pandemia, tal como se ha hecho en los anteriores dos años", así como "trabajar con el resto de entidades festivas de la ciudad para ayudar al desarrollo de sus actividades y aumentar la subvención donde se considere".
La votaron el equipo de gobierno y el PP. Ciudadanos había anunciado la abstención porque, en palabras de Amparo Picó, la moción "es una cortina de humo" para, posteriormente, votarla a favor y quedarse así sólo Vox con la abstención por no creer en la alternativa.
El portavoz de fiestas en el grupo municipal popular, Santiago Ballester, había justificado la articulación de la ayuda en la necesidad de "salvaguardar las Fallas y su tejido productivo. Han sido años muy difíciles, en los que los falleros y falleras han respondido como saben: responder, ser solidarios. Si, se han dado ayudas extraordinarias, -en alusión a las de 2020 y 2021- a las que casi todas las comisiones han respondido. Pero se han perdido falleros, cuotas y patrocinadores. El esfuerzo económico, las contrataciones con ingresos reducidos han dejado tocadas las finanzas de unas comisiones que empiezan ahora el ejercicio. A lo que hay que añadir la subida de las materias primas. por eso hay que apoyarles más que nunca. Y es algo que traslada la interagrupación, las Federaciones de Especial y Primera A".
El concejal Carlos Galiana echó mano del archivo de actuaciones para recordar que "este equipo de gobierno lleva 15 millones en ayudas a fiestas desde el inicio de la pandemia. Creo que se ha hecho un buen trabajo".
Se notó la entente entre la concejalía gobernante y el PP, reconociéndole esa paternidad. "Agradezco el tono del señor Ballester y una parte de la moción es suya", a lo que añadió como apostilla que "ya veremos de donde sacamos el dinero". El PP se adjudicó el "tanto". De hecho, dan por hecho que si no se presentaba la moción, no habría ayuda extraordinaria, puesto que en ningún momento se había expresado así el equipo de gobierno. La última vez, el 19 de marzo, se había dado largas al tema. Tuvieron que sacrificar, en ese sentido, la segunda parte de la moción, en la que se instaba en seguir trabajando por la ley de mecenazgo, rechazada semanas atrás en el Consell.
Se aventura en todo caso en el horizonte que el desencuentro puede ser directamente proporcional a lo que se tarde en articular esas ayudas de deceleración. Hay que recordar, en ese sentido, que no sólo el PP se impaciento con el que acabó siendo 30 por ciento suplementario en 2022, sino la propia asamblea, donde se pidió en alguna ocasión no tanto recibir el dinero como saber qué cantidad iba a ser.
En todo caso, el texto queda muy abierto y sin cuantificar porque Galiana dejó entrever su poco convencimiento de la fórmula 75+75 por ciento aplicada los dos últimos años. "Deberíamos mirar bien si el 150 por ciento que se comprometió de aportar en dos años a la falla se vio realmente en la calle. Quizá hay que estudiar bajo qué criterio se conceden".
Los porcentajes
El ayuntamiento modificó el pasado ejercicio la ayuda fija, que pasó del 25 al 30 por ciento, y cifró la extraordinaria -la que estaba ahora en juego- en un 30 más. El tablero, según explicaron fuentes municipales, devuelve la "normalidad" al 25 por ciento de antes de la pandemia (porcentaje sólo rebajado durante unos años durante la crisis económica de la primera década de siglo) y, a partir de ahí es cuando se sabrá en qué se sustancia la ayuda y bajo qué criterio.
En cualquiera de los casos, el mérito de este plus, sea de la cuantía que sea, en lo que es el ámbito fallero, hay que atribuirselo especialmente a las federación de Especial y Primera A, que son los colectivos que pidieron, incluso machaconamente, no pasar del todo a la nada, sino tener una ayuda de transición. En los últimos meses de ejercicio, nadie más en la asamblea reclamó estas ayudas extra pensando en 2023, algo que podría llegar a ser clave a la hora de reestablecer el criterio de reparto del dinero, sea de la cuantía que sea.
Amparo Picó anunció que el grupo Ciudadanos presentará en el Congreso de los Diputados conceder a las Fallas la condición de Actividad Cultural Protegida por la Ley de Mecenazgo "por tratarse de un motor generador de economía y empleo", para después enzarzarse con Galiana sobre la necesidad de subvencionar al resto de fiestas y si esto ya se había hecho o no.
