Nico Garcés estrena nombramiento en la Junta Central Fallera

La Junta Central Fallera ha anunciado el nombramiento del hasta ahora secretario general de la Junta Central Fallera en el puesto de Coordinador General de Fallas. Es el resultado propuesto por la Comisión de Valoración, que ha evaluado la propuesta de cuatro candidatos a dicho puesto. Que, en la práctica, es un cambio en la denominación de las mismas funciones, pero con una modificación sustancial: ahora pasa a ser un cargo remunerado. 

La Comisión de Valoración llevó a cabo un examen a los cuatro candidatos, entre los que también se encontraba el ex concejal de Fiestas Carlos Galiana. Tras la presentación por parte de todos ellos de un informe por escrito, y de acreditar la titulación universitaria y los méritos curriculares que consideraran, se completó con una entrevista oral, celebrada en el ayuntamiento el pasado día 10. 

El resultado de los mismos da como ganador del mismo a Nico Garcés porque "concurre un conjunto de méritos que le confieren la mayor idoneidad para su nombramietno, en concreto, tanto su perfil como su experiencia, la solvencia demostrada en las cuestiones formuladas en la entrevista y la completa memoria presentada, de conformidad con los item o conceptos considerados por la Comisión". 

Morbo con Galiana

Este concurso había encontrado un morbo inesperado cuando Galiana presentó su candidatura. Una propuesta que se antojaba especialmente incómoda, porque habría sido difícil el encaje con una concejalía llevada por el PP, después de haber sido concejal de Compromís durante ocho años. Hay que tener en cuenta, de todos modos, que el nombramiento no supone un blindaje o un puesto de funcionario: Garcés puede ser cesado de su cargo en cualquier momento si hubiera incompatibilidad en la coexistencia con sus inmediatos superiores, sea Ballester o cualquier otro edil. 

Este concurso se ha llevado a cabo para remunerar el cargo. Hay que recordar, en ese sentido, que el "secretario general" lleva ya varias legislaturas siendo un cargo de pago al aparecer por ley la figura del "coordinador general", que debían tener por ley los organismos autónomos municipales y que, como es fácil imaginar, recaerían en la misma persona. Los grupos políticos municipales de primeros de siglo lo asumieron como primer paso de la "profesionalización" que tuvo la JCF, más allá de los administrativos que estaban (y están) en nómina.

Por ese cargo han pasado Vicente Fayos, José Luis Vaello, José Martínez Tormo, Ramón Estellés y Joaquín García Ortells. Los dos primeros lo hicieron como asesores del grupo municipal popular al no disponer de la titulación necesaria. Una fórmula que también aceptó la oposición ya que, en un futuro, podrían acogerse a ella. Los tres de Compromís pudieron ejercer de coordinadores (y, por ende, de secretarios generales, puesto que ambos cargos iban, en ese momento, indisolublemente unidos) merced a sus titulaciones. En cualquiera de los casos, esa figura pasó, con esas dos fórmulas, pasó a estar remunerada, de acuerdo, además, a las exigencias de una fiesta que requería ya mucha más atención de su gerente principal.

Cuando Galiana se hizo cargo de la concejalía la partió en dos áreas. Una técnica y otra fallera. La remuneración fue a parar a la parte técnica, en la figura de Carmen Martínez, mientras que Carmen Blasco -y después Inmaculada Mata- se ocuparon de la parte fallera, pero en ambos casos sin remuneración. Se centraba la profesionalización, de esta forma, en todo lo tocante a los procedimientos legales, cada vez más exigentes en la legislación municipal, mientras que la parte más festiva se quedaba, en esos momentos, "a la antigua", como una cuestión de voluntariado.

Con la llegada de Ballester a la presidencia se sabía que el cargo de Nico Garcés se activaría para tener también remuneración, puesto que Carmen "Menchu" Martínez ha seguido siendo la coordinadora técnica.De esta forma, las dos partes de gestión de la fiesta pasan a estar profesionalizadas. Ahora el PP y en el futuro cualquier otro partido podrán disponer de las dos plazas. Otro cargo sobre el que existe el debate sobre su profesionalización es una jefatura de prensa, que tienen otros organismos autónomos municipales, pero no la JCF.

Compromís habla de "traje a medida", "posible estafa" y "tufo a corrupción"

Este concurso ha sido cuestionado por Compromís. El concejal Pere Fuset lo ha calificado de "posible paripé por poner un sueldo de 70.000 euros a una persona bien concreta. Un salario a dedo" que, aseguran, van a denunciar en los juzgados. Ahora, tras conocerse el fallo de la comisión, vuelve a la carga tildando el proceso de "traje a medida" y con la sensación a "tufo de caciquismo y corrupción" en un proceso "que desde un principio identificamos como una posible estafa".

"Lo hacen además a pocas horas de conocer las Cortes de Honor de 2025 con toda la intención de que este acto y su repercusión puedan eclipsar el esperado resultado de un proceso fake que buscaba blanquear la imagen de lo que no era más que un sueldo a dedo creado por el Partido Popular a costa de la fiesta. Lejos de apostar por la profesionalización que supondría contratar diversos funcionarios técnicos para ayudar a las comisiones falleras, optan por crear un sueldo a medida para un trabajo hasta la fecha voluntario. Ha pasado lo que todo el mundo sabía que iba a pasar con el resultado que hace un año ya pudimos avanzar sin ser adivinos. Como anunciamos en el Consell Rector de Junta Central Fallera vamos a llevar este tema a la justicia para que investigue las posibles contradicciones, irregularidades y presiones en un proceso con varias renuncias y cambios en el jurado, sin baremos ni criterios de elección definidos y con una más que dudosa cobertura legal, además de duplicidades de funciones" aseguró Fuset.