El ritual que anuncia el final de las Fallas

La noche de la "cremà" y con ella, el final de las fiestas, está a punto de llegar. Y una muestra más de ello, al final de la mascletà ha llegado uno de los rituales ya instalados en el imaginario: el cierre del balcón. 

A pesar de que todavía se tiene que abrir para la "cremà", la última "mascletà" tiene mucho de simbólico. Pero ahora se añade también la "passejà" previa alrededor del recinto de la "mascletà", donde las emociones se disparan. Luego también se pasa mal en el balcón, especialmente además, cuando suena la canción de "Un Beso y una Flor" de Nino Bravo, que siempre es la última en el "track list". 

Al acabar el disparo también hubo tiempo para la emotividad con la presencia de los padres -primero se cumplió gráficamente con las fiestas hermanas- y chóferes. 

Posteriormente, y con las cortes de honor ya saliendo del particular "teatro de los sueños", que estrenaron el 23 de febrero con la mascletà del día de la Crida, Berta Peiró y Lucía García completaron el ritual, cerrando la puerta de la casa grande. Esta vez que un cierre tranquilo, sin grandes lágrimas. Que seguramente llegarán el 9 de octubre próximo, cuando las mayores suban por última vez al balcón para despedir su reinado, que se materializará unos pocos días después.