Es momento para recapitular y analizar todo lo que ha ocurrido con nuestras finanzas. En plena recta final de año conviene hacer un repaso para saber qué ha pasado durante todo el año, cuáles han sido los gastos principales y qué se puede hacer en el último mes que pueda favorecer a una mejor gestión de nuestros bolsillos.

El primer paso es conocer cuál ha sido nuestro comportamiento, los ingresos y los gastos. En definitiva, es analizar nuestro perfil y basándonos en él, hacer una hoja de ruta financiera, y el primer paso de esta ruta consiste en aligerar la carga fiscal de la declaración de la Renta 2018.

Para ello, se les puede sacar partido a los planes de pensiones. Los contribuyentes pueden conseguir un ahorro fiscal realizando aportaciones a los planes de pensiones. Los que se decanten por este 'truco' fiscal deben saber que hay un límite en las aportaciones que es de 8.000 euros al año y se podrá deducir en la declaración de la Renta hasta 8.000 euros o el 30% de los rendimientos netos del trabajo y actividades económicas, la cantidad que sea menor.

Además, es en este momento del año en el que las entidades promocionan los planes de pensiones, lanzando ofertas con regalos o incentivos, cuyos pros y contras siempre conviene analizar.

Compensa pérdidas con ganancias

Es un buen momento para compensar aquellas pérdidas patrimoniales que se hayan experimentado con todas las ganancias patrimoniales del ejercicio. Si no se pueden compensar con las ganancias del mismo ejercicio, es posible compensarlas con ganancias patrimoniales de ejercicios anteriores de hasta los 4 ejercicios fiscales anteriores (la recomendación es ir compensando las más antiguas) y se podrá hacer hasta en un 25% por los rendimientos de capital mobiliario (depósitos, cuentas, dividendos€).

La solidaridad también desgrava

También la solidaridad tiene su hueco en esta recta final de año. De cara a una mayor desgravación en la declaración de la Renta, quizás es el momento de realizar donaciones ya que tienen un porcentaje de deducción del 75% los primeros 150 euros. Todo lo que exceda de los 150 euros, puede tener una deducción del 30% si no ha sido una acción recurrente (donaciones a la misma entidad en los dos años anteriores) y del 35% si sí lo ha sido.

Tus finanzas en 2019

Hechos los deberes este año, conviene pensar en cómo organizar las finanzas del 2019. Habiendo repasado nuestro comportamiento, los gastos y la capacidad de ahorro, el primer paso es pensar qué productos son los adecuados para cada perfil y objetivo. El producto de ahorro más sencillo y con menor riesgo es una cuenta remunerada, pero también es la opción menos rentable (la remuneración media está en el 0,30% TAE).

Los depósitos a plazo son otra opción de ahorro sujeta a poco riesgo. En este caso, hay que saber que los depósitos a largo plazo ofrecerán siempre una mejor rentabilidad, pero hay que tener claro que no se podrá disponer de ese dinero en un periodo de tiempo amplio (generalmente de 3 a 5 años). Es importante que el fondo esté siempre cubierto por algún Fondo de Garantía de Depósitos, el español cubre hasta 100.000 euros por entidad y cliente.

Para los que busquen en 2019 una mayor rentabilidad pero también sean capaces de asumir un mayor riesgo, la alternativa son los fondos de inversión. La tolerancia al riesgo será la que marque la hoja de ruta de la inversión, pudiendo tener acceso a invertir en una amplia variedad de activos y mercados. La clave aquí estará en diversificar la cartera de inversión.

Además, hay otros productos de ahorro que es posible valorar de cara a 2019, como son los ya mencionados planes de pensiones, o los seguros de ahorro. En cualquier caso, lo más importante es siempre conocer bien el producto, analizar sus características, valorar si encajan con nuestros objetivos financieros y nunca firmar un producto si tenemos dudas de su funcionamiento o si hay cláusulas en el contrato que no están claras.