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Ver galería >Xaló bulle las mañanas de los sábados. Su rastro, uno de los más antiguos de la Comunitat Valenciana, es un universo de tesoros y bagatelas. Tiene un punto kitsch que lo hace único. Las horas se van volando mientras se curiosea y regatea. Imposible marcharse con las manos vacías. Todo tiene vida propia. La mañana es redonda si Xaló celebra su festival Xalónia: tradición y pueblo.
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Xaló bulle las mañanas de los sábados. Su rastro, uno de los más antiguos de la Comunitat Valenciana, es un universo de tesoros y bagatelas. Tiene un punto kitsch que lo hace único. Las horas se van volando mientras se curiosea y regatea. Imposible marcharse con las manos vacías. Todo tiene vida propia. La mañana es redonda si Xaló celebra su festival Xalónia: tradición y pueblo.
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Xaló bulle las mañanas de los sábados. Su rastro, uno de los más antiguos de la Comunitat Valenciana, es un universo de tesoros y bagatelas. Tiene un punto kitsch que lo hace único. Las horas se van volando mientras se curiosea y regatea. Imposible marcharse con las manos vacías. Todo tiene vida propia. La mañana es redonda si Xaló celebra su festival Xalónia: tradición y pueblo.
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