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F. Calabuig
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Francisco Calabuig
Catarroja y Massanassa son dos pueblos unidos por el puente que cruza el barranco del Poyo, y desde el pasado 29 de octubre , también está unidos por el dolor de las pérdidas humanas y materiales caasadas por el desbordamiento. Justo el día que se cumple un mes de la tragedia, han querido “poner luz” a este drama. Así, atendiendo a una convocatoria vecinas realizadaa través de redes sociales, vecinos de Catarroja y Massanassa han salido desde sus ayuntamientos y otros puntos de sus localidades en una marcha cívica hacia el puente, donde al igualque ha ocurrido en Paiporta, han colocado velas en honor a las víctimas, queentre las dos poblaciones suman 36. “Hagamos un homenaje. Dejemos la ira y la política para otros momentos”,era el objetivo de los convocantes de esta emotiva cita, que de nuevo ha puesto sobre la palestra la gran “germanor” que existe entre los pueblos de l’Horta Sud, a los que les une el barranco y ahora el dolor, pero también la esperanza.
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Catarroja y Massanassa son dos pueblos unidos por el puente que cruza el barranco del Poyo, y desde el pasado 29 de octubre , también está unidos por el dolor de las pérdidas humanas y materiales caasadas por el desbordamiento. Justo el día que se cumple un mes de la tragedia, han querido “poner luz” a este drama. Así, atendiendo a una convocatoria vecinas realizadaa través de redes sociales, vecinos de Catarroja y Massanassa han salido desde sus ayuntamientos y otros puntos de sus localidades en una marcha cívica hacia el puente, donde al igualque ha ocurrido en Paiporta, han colocado velas en honor a las víctimas, queentre las dos poblaciones suman 36. “Hagamos un homenaje. Dejemos la ira y la política para otros momentos”,era el objetivo de los convocantes de esta emotiva cita, que de nuevo ha puesto sobre la palestra la gran “germanor” que existe entre los pueblos de l’Horta Sud, a los que les une el barranco y ahora el dolor, pero también la esperanza.
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Catarroja y Massanassa son dos pueblos unidos por el puente que cruza el barranco del Poyo, y desde el pasado 29 de octubre , también está unidos por el dolor de las pérdidas humanas y materiales caasadas por el desbordamiento. Justo el día que se cumple un mes de la tragedia, han querido “poner luz” a este drama. Así, atendiendo a una convocatoria vecinas realizadaa través de redes sociales, vecinos de Catarroja y Massanassa han salido desde sus ayuntamientos y otros puntos de sus localidades en una marcha cívica hacia el puente, donde al igualque ha ocurrido en Paiporta, han colocado velas en honor a las víctimas, queentre las dos poblaciones suman 36. “Hagamos un homenaje. Dejemos la ira y la política para otros momentos”,era el objetivo de los convocantes de esta emotiva cita, que de nuevo ha puesto sobre la palestra la gran “germanor” que existe entre los pueblos de l’Horta Sud, a los que les une el barranco y ahora el dolor, pero también la esperanza.
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Catarroja y Massanassa son dos pueblos unidos por el puente que cruza el barranco del Poyo, y desde el pasado 29 de octubre , también está unidos por el dolor de las pérdidas humanas y materiales caasadas por el desbordamiento. Justo el día que se cumple un mes de la tragedia, han querido “poner luz” a este drama. Así, atendiendo a una convocatoria vecinas realizadaa través de redes sociales, vecinos de Catarroja y Massanassa han salido desde sus ayuntamientos y otros puntos de sus localidades en una marcha cívica hacia el puente, donde al igualque ha ocurrido en Paiporta, han colocado velas en honor a las víctimas, queentre las dos poblaciones suman 36. “Hagamos un homenaje. Dejemos la ira y la política para otros momentos”,era el objetivo de los convocantes de esta emotiva cita, que de nuevo ha puesto sobre la palestra la gran “germanor” que existe entre los pueblos de l’Horta Sud, a los que les une el barranco y ahora el dolor, pero también la esperanza.
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Catarroja y Massanassa son dos pueblos unidos por el puente que cruza el barranco del Poyo, y desde el pasado 29 de octubre , también está unidos por el dolor de las pérdidas humanas y materiales caasadas por el desbordamiento. Justo el día que se cumple un mes de la tragedia, han querido “poner luz” a este drama. Así, atendiendo a una convocatoria vecinas realizadaa través de redes sociales, vecinos de Catarroja y Massanassa han salido desde sus ayuntamientos y otros puntos de sus localidades en una marcha cívica hacia el puente, donde al igualque ha ocurrido en Paiporta, han colocado velas en honor a las víctimas, queentre las dos poblaciones suman 36. “Hagamos un homenaje. Dejemos la ira y la política para otros momentos”,era el objetivo de los convocantes de esta emotiva cita, que de nuevo ha puesto sobre la palestra la gran “germanor” que existe entre los pueblos de l’Horta Sud, a los que les une el barranco y ahora el dolor, pero también la esperanza.
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Catarroja y Massanassa son dos pueblos unidos por el puente que cruza el barranco del Poyo, y desde el pasado 29 de octubre , también está unidos por el dolor de las pérdidas humanas y materiales caasadas por el desbordamiento. Justo el día que se cumple un mes de la tragedia, han querido “poner luz” a este drama. Así, atendiendo a una convocatoria vecinas realizadaa través de redes sociales, vecinos de Catarroja y Massanassa han salido desde sus ayuntamientos y otros puntos de sus localidades en una marcha cívica hacia el puente, donde al igualque ha ocurrido en Paiporta, han colocado velas en honor a las víctimas, queentre las dos poblaciones suman 36. “Hagamos un homenaje. Dejemos la ira y la política para otros momentos”,era el objetivo de los convocantes de esta emotiva cita, que de nuevo ha puesto sobre la palestra la gran “germanor” que existe entre los pueblos de l’Horta Sud, a los que les une el barranco y ahora el dolor, pero también la esperanza.
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Catarroja y Massanassa son dos pueblos unidos por el puente que cruza el barranco del Poyo, y desde el pasado 29 de octubre , también está unidos por el dolor de las pérdidas humanas y materiales caasadas por el desbordamiento. Justo el día que se cumple un mes de la tragedia, han querido “poner luz” a este drama. Así, atendiendo a una convocatoria vecinas realizadaa través de redes sociales, vecinos de Catarroja y Massanassa han salido desde sus ayuntamientos y otros puntos de sus localidades en una marcha cívica hacia el puente, donde al igualque ha ocurrido en Paiporta, han colocado velas en honor a las víctimas, queentre las dos poblaciones suman 36. “Hagamos un homenaje. Dejemos la ira y la política para otros momentos”,era el objetivo de los convocantes de esta emotiva cita, que de nuevo ha puesto sobre la palestra la gran “germanor” que existe entre los pueblos de l’Horta Sud, a los que les une el barranco y ahora el dolor, pero también la esperanza.
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