Ver más galerías relacionadas
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Eduardo Ripoll
A ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.
Noticia guardada en tu perfil
Ver noticias guardadasA ritmo de músicas alegres, bajo un sol de justicia y ante un numerosísimo público, la semana Santa Marinera ha finalizado con el desfile de resurrección, un acto que ha tenido que esperar tres años para volver a celebrarse. El tradicional desfile del domingo se caracteriza porque los cofrades regalan flores al público.