El francés Victor Lafay (Cofidis) se impuso en la octava etapa del Giro de Italia tras derrotar a sus compañeros de fuga en las rampas de Guardia Sanframondi. El húngaro Attila Valter (Groupama FDJ) salvó la maglia rosa un día más.

Apenas hubo movimientos entre los hombres de la general, que subieron el ritmo en los últimos kilómetros, aunque ninguno de los aspirantes sufrió para entrar en el grupo principal. Pello Bilbao (Bahrein) tuvo un enganchón ya dentro de los últimos mil metros y llegó algo más rezagado a la línea de meta. 

Pudo parecer un día de transición vistos los resultados en la línea de llegada, pero la realidad estuvo lejos de ser esa porque las etapas se corren desde el primer kilómetro y el Giro esconde trampas en cada esquina.

La salida fue rapidísima, por un terreno abierto y con el viento tomando un papel protagonista. Cuando el pelotón se preparaba para evitar que una fuga se formase pronto y la tranquilidad reinara hasta la llegada de los puertos, el dios Eolo decidió ponerse a jugar y el nerviosismo se instaló por todos lados.

Ineos entendió la situación y puso empeño en intentar sacar provecho de ello con el italiano Filippo Ganna siempre cuidando del colombiano Egan Bernal, que se filtró en un grupo delantero mientras muchos de los demás favoritos se quedaban más atrás. Deceuninck solventó ese momento de incertidumbre y, aunque la tensión se mantuvo durante más de cincuenta kilómetros, ya no hubo lugar para más sorpresas.

Se voló en esa primera hora de carrera y fueron incontables los corredores que buscaron una escapada que estaba destinada a triunfar dado la orografía de la etapa de este sábado. Dicha fuga no se hizo subiendo, sino que salió adelante en un rápido descenso rumbo a Bocca Della Selva, el primero de los pasos montañosos.

Mientras se iban conociendo los nombres de los escapados, sin españoles entre ellos, el Giro informaba del abandono del velocista australiano Caleb Ewan (Lotto Soudal), aquejado de problemas en sus rodillas y con un botín de dos triunfos de etapa.

El Groupama del líder Attila Valter se puso en cabeza del pelotón y la señal fue interpretada por todos como una tregua definitiva. La suerte estaba echada y los nueve de cabeza tenían libertad para acumular los minutos de ventaja suficientes para jugarse el triunfo en los kilómetros finales. El portugués Nelson Oliveira (Movistar) era el mejor clasificado en la general, a más de quince minutos, así que no hubo nada de lo que preocuparse.

El desenlace en la escapada fue realmente intenso, con Victor Campenaerts (Team Qhubeka) buscando su oportunidad constantemente, algo similar a lo que intentó en el descenso del primer puerto el colombiano Fernando Gaviria (UAE Emirates), que se filtró en la fuga, sumó puntos en su lucha por la Ciclamino y también tuvo tiempo de irse al suelo cuando atacaba bajando.

Ganó Lafay porque fue el más fuerte en esas rampas finales de Guardia Sanframondi donde terminó la octava etapa. Esperó agazapado su momento y asestó el golpe cuando debía hacerlo. Dio caza primero a Campenaerts y más tarde al italiano Giovanni Carboni (Bardiani) para entrar en meta en solitario y dar el primer triunfo de la carrera a Cofidis.

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Casi cinco minutos más tarde llego el grupo con los favoritos, encabezado por el portugués Joao Almeida (Deceuninck), donde solamente faltó Pello Bilbao, que se fue al suelo sin aparentes consecuencias debido a quedarse enganchado con el italiano Matteo Fabro (Bora) en los últimos metros de la etapa. Egan Bernal, Remco Evenepoel (Deceuninck), Simon Yates y compañía firmaron la paz ante la llegada de los platos principales.

Será este domingo cuando todos ellos afronten una prueba de fuego, quizá la primera de verdad, al menos a priori. Los corredores tendrán que cubrir los 158 kilómetros que separan Castel di Sangro de Campo Felice, una subida de primera categoría que termina con un tramo del famoso 'sterrato' italiano. Antes, por el camino, se verán obligados a superar otras tres ascensiones importantes, dos de segunda y una de tercera categoría en otra etapa que volverá a poner las cartas sobre la mesa entre los grandes favoritos a conquistar este Giro 2021.