Los resultados electorales del 24-M han dado un vuelco a la situación política en el Ayuntamiento de Massamagrell, donde la irrupción de nuevos partidos, junto con la caída del PP deja las puertas abiertas a un pacto mínimo a tres bandas o un cuatripartito entre las formaciones de izquierda para desbancar a los populares y alzarse con la vara de mando tras diez años de gobierno de Miguel Bailach.

Los populares han sido la lista más votada, pero pasan de 9 a 5 ediles, lo que les imposibilita, a priori, formar equipo de gobierno y todo apunta a que habrá fumata blanca entre PSOE, Compromís, Podemos y EU. La unión de socialistas, nacionalistas y Podemos otorgaría nueve ediles y con ello mayoría absoluta, aunque no se descarta que también pueda unirse EU y tener un gobierno cuatripartito con 10 concejales. No obstante, habrá que «dialogar mucho», aseguran, y poner puntos en común para llevar a buen puerto un gobierno progresista.

Desde el PP el alcalde en funciones y cabeza de lista, Miguel Bailach, asume la debacle pese a ser el más votado y sostiene que «los resultados no son buenos. Esperábamos obtener entre 6 y 8 ediles. La gente quiere un cambio y el pueblo nunca se equivoca. La gestión ha sido buena, pero la gente no lo ha valorado, ha pesado más otros condicionantes en contra del PP»

El candidato del PSOE, Paco Gómez, que también pierde un edil, se muestra satisfecho ya que «hemos cumplido el objetivo de arrebatar la mayoría absoluta al PP y ahora podrá haber un gobierno de izquierdas en Massamagrell, que ya tocaba». Ahora «se abre un periodo de negociaciones con todos menos con el PP para buscar un equipo de gobierno fuerte, pues nos unen más cosas que nos separan y el objetivo es común».

Por su parte, el portavoz de Compromís, Pep Galarza, no ocultaba su satisfacción: «hemos duplicado el número de votos y pasamos de uno a tres concejales». Para Galarza los resultados «son muy positivos para nosotros, mientras que se castiga al PP y al PSOE se le da un tirón de orejas, porque también bajan. Es hora de un pacto de izquierdas y el PP que pase al rincón de pensar».

Otro que no oculta su satisfacción es Jorge Ferrer, número uno de Veïns por Massamagrell: «Hemos cumplido el objetivo, todo un éxito. Logramos un concejal cuando somos una marca local y pequeña. No vamos a pactar con ningún partido político, como marcan nuestros estatutos».

Desde EU, su candidato Pablo Garcés, también muestra su preocupación por «haber perdido votos», pese al «buen trabajo». «Es momento del cambio y de un pacto de izquierdas pero no a cualquier precio. Y es muy importante hacer políticas para pueblo y no de espaldas a él», añadió.

Otra valoración positiva la realiza el alcaldable de Cs, Jesús Gimeno, quien destaca que para ser los primeros comicios y con muchas prisas «es todo un logro» alcanzar representación municipal. No contempla pactar con los partidos grandes. Desde Podemos, su candidato José Gimeno señaló que sus dos actas les sitúan en una posición de privilegio para formar gobierno de izquierdas, «siempre que se respeten nuestras bases fundamentales como son la participación ciudadana. Ahora tenemos que reunirnos y que la asamblea opine».