El próximo gobierno municipal de izquierdas de Paterna se encontrará una situación financiera en el ayuntamiento que ya quisiera para sí el próximo Consell. Mientras el popular Alberto Fabra se gastó antes de las elecciones 727 millones de anticipos del Estado que le correspondía gestionar al futuro gobierno de la Generalitat Valenciana, en el consistorio paternero el gobierno local del PP que preside en funciones la alcaldesa en funciones, Elena Martínez, deja en caja alrededor de 20 millones, según el Estado de Tesorería al que ha tenido acceso Levante-EMV.
A fecha de 20 de mayo de 2015, el Estado de Tesorería detalla más de 21,6 millones distribuidos en cuentas municipales de seis entidades bancarias y cajas. Hasta 8,6 millones se acumulan en una cuenta, mientras la segunda más abultada es otra de casi 6,2 millones.
Desde el gobierno del PP se destacó ayer que deja al nuevo alcalde unas cuentas «saneadas» tras ocho años de mandato popular. De esos 21,6 hay que restar las nóminas pagadas en junio (1,5 millones), pero también hay que tener en cuenta que se sigue cobrando el recibo de la contribución durante estos días.
De los alrededor de 20 millones que quedan en la tesorería, hay que restar los diez que se destinarán a la reducción de deuda con una modificación de crédito aprobada en mayo, pero que se tiene que ratificar definitivamente. Así, el consistorio se desprende de un crédito que suponía el pago de más de 450.000 euros anuales en intereses, al margen de la amortización. La deuda global quedaría en torno a los 30 millones de euros, con lo que el PP destacó ayer, en un comunicado, que se cerrará el mandato «con la deuda por habitante más baja que la encontrada al acceder al gobierno en 2007».
Asimismo el futuro gobierno dispondrá de 1,2 millones de euros que el PP aprobó destinar a diversas obras de mejora en colegios e instalaciones deportivas y que están pendientes de contratación.
Según fuentes del Gobierno local en funciones, el nuevo alcalde puede disponer de entre ocho y nueve millones para inversiones financieramente sostenibles que deben ser autorizadas por el Ministerio de Hacienda, ya que la Ley de Racionalización de las Administraciones Locales impide aumentar los gastos y se debe demostrar que son obras necesarias y que si no se hacen a la larga generarán más gasto. Así la compra de la cueva que visitó el rey Alfonso XIII „saldrá a subasta por el concurso de acreedores de Sumpa„ puede no ser autorizada.
La alcaldesa de Paterna en funciones, Elena Martínez, indicó ayer que «hemos trabajado con sentido común y responsabilidad para mejorar la situación municipal, hay proyectos que no se han materializado y que dependen del próximo gobierno y otros que están muy avanzados y simplemente se culminarán. El próximo gobierno tendrá que tomar sus decisiones pero siempre encontrará en nosotros un aliado para el desarrollo de las actuaciones que supongan una mejora de la calidad de vida de los paterneros».
Martínez garantiza que a partir de la elección del nuevo alcalde, el próximo sábado, 13 de junio, en el pleno de investidura, facilitará «un relevo tranquilo y bajo la más absoluta normalidad democrática, favoreciendo por encima de todo los intereses de los ciudadanos».
Así, Martínez trasladará al próximo alcalde socialista o de Compromís „Juan Antonio Sagredo y Juanma Ramón han dicho que no renuncian a la alcaldía al estar empatados a seis ediles, aunque el primero es el más votado„ los asuntos que se encuentran en trámite con el «objetivo de que, respetando la libertad del futuro gobierno municipal a tomar las decisiones que estimen oportunas, el cambio no suponga una demora de estas actuaciones que ya están aprobadas y son de consenso».
Sobre el proyecto de zona franca, Martínez recordó que, una vez tramitado en la Dirección General de Aduanas del Ministerio de Hacienda, su aprobación se encuentra pendiente de la decisión del Secretario de Estado. La alcaldesa trasladará al próximo alcalde los contactos de los potenciales inversores que «se han interesado» por un proyecto que la oposición ha rechazado hasta ahora. En cuanto a Puerto Mediterráneo, la mandataria expuso que es una Actuación Territorial Estratégica en tramitación por parte de la Generalitat Valenciana, y aunque su aprobación depende por tanto de la administración autonómica el próximo alcalde deberá adoptar el posicionamiento que estime oportuno.
A la alcaldesa en funciones, que precisó que el PP seguirá apoyando esos proyectos porque son inversiones que generarán empleo, consideró «razonable y coherente» la idea del alcaldable socialista, Juan Antonio Sagredo, de realizar un proceso de participación ciudadana para alguno de estos proyectos.
«No es una mala iniciativa dejarlo a decisión de la ciudadanía», expuso. Tanto Compromís como EU han marcado la línea roja respecto ambos planes urbanísticos advirtiéndole al PSPV que están en contra totalmente.
