Además de 800 bombillas Led en el sótano —como ayer informaba Levante-EMV—, ¿qué más se ha encontrado al aterrizar en la alcaldía de Paiporta?
Nos hemos encontrado muchos servicios desmantelados, especialmente el área de Bienestar Social y la de Informática, que son vitales hoy en día. En Bienestar Social hay recursos ínfimos para atender la demanda de usuarios que hay. De hecho, no paramos de recibir visitas de personas a las que van a cortar la luz o el agua, o en proceso de desahucio.
El tema de los desahucios ha sido una de las batallas de los partidos de izquierdas en la oposición en el pasado mandato, ya que se criticaba el elevado número tramidado en Paiporta.
Yo creo que estamos un poco por encima de la media respecto a otros pueblos porque son situaciones que no se han atendido en su momento y se llega a una situación extrema. El segundo día de estar en el gobierno tuvimos que evitar que fuera la Policía Local a ejecutar un desahucio de un alquiler. Nuestra idea es poner en marcha una oficina de atención a las personas en situación de desahucio. Ya hemos dado los primeros pasos. Y también vamos a proporcionarles asistencia jurídica.
Algunos de los nuevos alcaldes van a encararse directamente con los bancos y otros ya lo han hecho en el pasado mandato. ¿Van a optar por esa vía?
Voy a mantener una reunión con los directores de los bancos de la población para tener un primer contacto y exponerles el problema porque es una responsabilidad que hemos de asumir entre todos. Les vamos a transmitir que el ayuntamiento no va a trabajar con entidades que dejen personas en la calle. Ellos lo entenderán y tampoco creo que les interese tener mala imagen.
¿Cómo es trabajar y gobernar con un tripartito?
En Compromís ya habíamos avanzado en ese aspecto porque nosotros somos una coalición. Ahora ya no celebramos reuniones de tres partidos sino de un solo equipo de gobierno. Estamos trabajando de forma transversal y todos estamos compartiendo en día a día en Bienestar Social, en Hacienda y en otras áreas.
¿Qué planes han trazado para luchar contra el paro?
Estamos aún diseñándolos porque nosotros queremos poner en marcha planes de empleo a largo plazo. Los primeros días nos reunimos con todos los trabajadores y les pedimos que nos hagan propuestas y planteen necesidades. Entendemos que los técnicos son los que más conocen. De forma paralela, de cara al verano habrá contratos para suplir al personal de vacaciones de la empresa municipal Espai y echaremos mano de la bolsa de trabajo o del Servef. También creemos que Espai puede asumir más servicios ahora privatizados como la asistencia a mayores o los programas con menores, y ahí también habrá puestos de trabajo.
El exalcalde popular Vicente Ibor les acusa a través de su Facebook de radicales. ¿Qué opina?
No le estamos haciendo mucho caso pero que un representante público se dedique a crear esa alarma infundada es irresponsable. Nos preocupa un poco, no sé si le afecta demasiado perder un cargo pero estas personas que se ponen de esta forma cuando pierden una responsabilidad demuestran que no tenían ese sentido de servicio al pueblo. Día a día estamos demostrando que no somos así. La gente nos conoce y sabe nuestra forma de trabajar. El radical es él.
Su partido ha sido muy crítico con la política cultural y la gestión del Auditori.
Los acuerdos irregulares con alguna compañía que hemos denunciado vamos a revisarlos y tomar las medidas legales que toque. Pero esos contratos a amiguitos se van a acabar, lo haremos todo con transparencia. Tenemos grandes edificios para promover la cultura y los técnicos hacen lo que pueden con el presupuesto. Queremos darle más relevancia a la cultura, ampliar la oferta y sacarla a la calle. Ahora tenemos encima de la mesa las fiestas de Sant Roc y nos habían dejado una partida mínima de poco más de 10.000 euros porque habían hecho modificaciones que hemos parado a tiempo.
¿Va a respaldar las reivindicaciones de la Plataforma Pel Comerç Valencià, a la que pertenece el comercio de Paiporta?
Sí. Es un tema que tenemos muy claro los tres grupos. No vamos a favorecer la llegada de empresas y grandes superficies que perjudiquen el comercio local. Vamos a apoyar a la plataforma en su batalla contra la apertura comercial los domingos porque estamos por la conciliación familiar. Tenemos que cambiar el modelo social instituido en la última década.
