Algunos vecinos de la zona se muestran aliviados después de que sus reclamaciones hayan sido atendidas. Aseguran que la música puesta todo el día era muy molesta y que no podían abrir las ventanas para no escucharla. Asimismo, reconocen que es un descanso que se cierre de 15.00 a 17.00 horas para poder relajarse un rato después de comer. m. Domínguez torrent